Los sindicalistas del metal continuarán su encierro en Vigo, pese a la reunión con la Xunta

Vigo.-  Los sindicalistas del metal que llevan desde el pasado miércoles encerrados en la planta cuarta del edificio administrativo de la Xunta en Vigo proseguirán con su protesta, al menos durante el fin de semana, pese a la entrevista que han mantenido hoy con el nuevo director general de Relaciones Laborales.

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(EFE)

Un obrero corta partes de hierro para su reciclaje en una planta metalúrgica. EFE/Archivo

Así lo informaron a Efe fuentes sindicales que lamentaron que dicho responsable de la Xunta tardara 48 horas en reunirse con ellos, cuando sí lo hizo "bastante antes" con la patronal del sector metalúrgico.

El encierro de los representantes de las tres centrales sindicales (CCOO, UGT y CIG) es como consecuencia de las posturas enfrentadas con la patronal por la negociación del convenio colectivo del sector metalúrgico, que en la provincia de Pontevedra afecta a unos 27.000 trabajadores.

Tras diferentes reuniones entre las partes, los posicionamientos están muy alejados: la patronal sólo modificó su postura sobre la duración del convenio colectivo, pasando de tres años que pedía a dos que estarían dispuestos a negociar los sindicatos.

También se mostró partidaria la patronal en regular la jornada laboral y la subida salarial, aunque los sindicatos expresaron sus dudas sobre esa pretensión.

Las negociaciones del convenio colectivo de los últimos años en Vigo se han caracterizado por movilizaciones tales como huelgas indefinidas en las que participaron hasta 20.000 trabajadores del sector y manifestaciones con altercados por las calles de la ciudad.

Precisamente, los sindicatos anunciaron ayer por la tarde el inicio de huelgas "periódicas" si la patronal o la nueva Xunta no mueven ficha en este conflicto laboral.

Por su parte, la patronal informó hoy, en comunicado de prensa, que las aproximadamente 2.500 empresas afectadas por el convenio colectivo del metal de Pontevedra están hoy en una situación "mucho más difícil que al inicio de las negociaciones".

Pese a ello, los empresarios recordaron que en la última reunión mantenida con los sindicatos sí se produjo un acercamiento de ambas posturas, por lo que no entienden el encierro en el edificio de la Xunta "para presionarnos a adelantar la reunión, ya acordada por ambas partes, sin haberse producido circunstancias o hechos relevantes que motiven la alteración del ritmo de la negociación".

La patronal destacó que en el marco del panorama económico de 4 millones de parados en España y con las previsiones de que la crisis se prolongará hasta mediados o finales de 2010 "creemos más que razonable la oferta de prórroga del convenio por dos años, contemplando el mantenimiento del poder adquisitivo de los trabajadores".

Para los empresarios el objetivo "primordial" en la actualidad es la "supervivencia y mantenimiento de las empresas, y la consiguiente conservación de los puestos de trabajo".

Aunque rechazaron de pleno el encierro de los sindicalistas, ofrecieron su disposición a continuar con la negociación, pero siempre que ésta se rija por los "principios de cordialidad y razonabilidad" necesarios para el diálogo.