Los portavoces del grupo Mixto creen que la remodelación "se ha quedado coja"

Madrid.-  Los portavoces de los partidos integrados en el Grupo Mixto han señalado hoy, con diferente grado de crítica, que la remodelación del Gobierno "se ha quedado coja" aunque algunos de ellos, como BNG, UPN o CC, han tendido la mano al Ejecutivo para llegar a acuerdos.

En su intervención durante la comparecencia del presidente del Gobierno en el pleno del Congreso para informar sobre los cambios en su Gabinete, el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, ha dicho que la "profunda remodelación" que ha tenido que hacer el presidente, Jose Luis Rodríguez Zapatero, "se queda coja en muchos aspectos".

En este sentido, ha considerado que no es suficiente con dar un mayor impulso, es necesario también -ha subrayado- "una reorientación de las políticas".

Tras valorar algunos cambios en la estructura del Gobierno, ha pedido un impulso decidido a las infraestructuras gallegas y que el nuevo modelo de financiación autonómica asegure plena suficiencia financiera a las autonomías.

El portavoz del BNG ha señalado por último que si el presidente del Gobierno quiere superar la debilidad parlamentaria y llegar a acuerdos con la izquierda son necesarias tres premisas: respeto a la pluralidad, compromisos con Galicia y políticas de izquierdas.

La portavoz de Coalición Canaria, Ana Oramas, ha señalado por su parte que los españoles y los canarios se preguntan si éste "es el mejor Gobierno, el de los mejores, que necesita España".

Ha pedido además al presidente del Gobierno que se adopten medidas que ayuden a su Comunidad a salir de una crisis que afecta a Canarias de forma especial, con la firma del plan de empleo, la agilización de las infraestructuras y el apoyo al sector turístico para salvar la temporada.

Para Oramas, es necesario además que Zapatero se reúna con el presidente canario, Paulino Rivero, para concretar medidas y para frenar la caída del empleo, motivada principalmente por el mal momento que vive el sector turístico.

La portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha indicado que si los cambios suponen un cambio de ritmo, no de rumbo, como ha afirmado el Gobierno, esto significa que en lugar de variar la política económica, que es lo que va mal, ésta "se va a seguir haciendo, pero más rápido para que caigamos -ha dicho- en el agujero más rápido".

A juicio de Díez, Rodríguez Zapatero ha demostrado con ello su "nulo" sentido de Estado y su "ausencia absoluta de autocrítica".

Según la portavoz de UPyD, el cambio de Gobierno no ha sido para afrontar la crisis, sino para "anticipar la crisis que puede sufrir" el PSOE, y para ello se ha subido al barco a la "vieja guardia" para que si éste se hunde todos hayan tenido responsabilidad en el hundimiento.

Desde UPN, su portavoz, Carlos Salvador, ha considerado que la gestión de los cambios ha sido "ineficaz" y ha apuntado que el éxito de la remodelación radicará en si es capaz de salir de la crisis.

"Creo que se equivocaría si no se guiase por menos partidismo, menos efectismo, más apertura, transparencia, reformas, consensos, pragmatismo y flexibilidad", ha añadido.

Salvador se ha mostrado convencido de que el nuevo Gobierno respetará los compromisos con Navarra y de que no habrá cambios en la política de firmeza contra ETA.

El Ejecutivo, ha agregado, puede contar con la disposición "leal y crítica" de su formación para "enfrentarse" a la mala situación económica, "por encima de nuestras relevantes diferencias".

La portavoz de Nafarroa Bai, Uxue Barkos, ha señalado que la remodelación se produce a tan sólo un año de ser nombrado, "sin coacción parlamentaria", y en la antesala de unas elecciones europeas que "parece no se le presentan muy propicias", todo lo cual da sensación de un "síntoma claro" de debilidad.

Sobre los nuevos ministros y sus primeras actuaciones, se ha preguntado por qué se ha desautorizado la propuesta para reformar la Ley de Cajas y qué es lo que se quiere hacer con la Ley de Dependencia tras cambiar las políticas sociales de ministerio.

En cuanto a la nueva vicepresidencia, ha dicho que se ha propuesto a Manuel Chaves "como árbitro de la financiación autonómica, para suavizar las cosas con Cataluña".