Concluye la campaña electoral argelina, marcada por una generalizada presencia de Buteflika

Argel.-  La campaña para las elecciones presidenciales argelinas del próximo jueves, 9 de abril, concluyó hoy marcada por la presencia generalizada de los mensajes del actual presidente y candidato a la reelección, Abdelaziz Buteflika, en los medios y los espacios públicos del país.

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(EFE)

El presidente argelino y candidato a la reelección, Abdelaziz Buteflika, saluda a sus seguidores durante un acto electoral celebrado hoy en Argel.

Los otros cinco candidatos a la presidencia criticaron en sus actos de fin de campaña los escasos medios a su disposición para hacer frente a la potente maquinaria electoral de Buteflika, que contó con el apoyo del Gobierno, los tres mayores partidos argelinos y decenas de asociaciones.

El candidato a un tercer mandato concluyó casi tres semanas de campaña durante las que se recorrió buena parte del país con un mitin ante cerca de 5.000 jóvenes en Argel en el que citó la posibilidad de convocar un referéndum sobre una amnistía general para los terroristas que abandonen "total y definitivamente las armas".

Buteflika aseguró que continuará la política de reconciliación nacional que ha aplicado desde su llegada al poder en 1999, aunque recalcó que "no habrá decisiones contra la voluntad del pueblo y los intereses del país".

Subrayó que el Estado "no abdicará ante quienes continúen con el terrorismo" y afirmó que las fuerzas de seguridad y el Ejército "vencerán a los grupos armados que rechacen aprovechar la ocasión de la reconciliación nacional".

Al igual que hizo durante gran parte de su campaña, Buteflika destacó que durante los últimos diez años Argelia "ha salido de la pesadilla y ha reencontrado la paz, la estabilidad y la vía del desarrollo".

Y se centró también en los llamamientos a acudir masivamente a las urnas y no respaldar las apelaciones, realizadas por algunos partidos de la oposición, a la abstención, su principal rival el próximo jueves.

"Tenéis todas las opciones en total transparencia, si queréis la continuidad votar por mi, sino por otros, pero acudir a votar, haced entender vuestra voz", recalcó al tiempo que consideró "imperativo devolver la legitimidad a las instituciones".

En las últimas elecciones legislativas de 2007 la abstención fue de un 64,33 por ciento y en las presidenciales de 2004 de un 42 por ciento, según los datos oficiales.

Una de las candidatas alternativas a Buteflika más conocida, la secretaria general del Partido de los Trabajadores (PT), Louisa Hanoun, única mujer al frente de una formación política en el país, concluyó su campaña en la capital de la Cabilia, Tizi-Ouzou, donde abogó por "la ruptura con el sistema de partido único".

"La verdadera paz no puede tener lugar sin una verdadera ruptura", dijo y subrayó que "el sistema de partido único es la causa de la paralización del proceso de desarrollo".

El candidato del partido islamista reformista El Islah, Djahid Younsi, cerró su campaña en el barrio popular de Bab el Oued en Argel, donde criticó la desproporción de sus medios frente a los del "candidato del poder".

Younsi lamentó que su formación, al igual que el resto, no tiene capacidad para contar con interventores en los más de 47.000 colegios electorales repartidos por todo el país para garantizar la limpieza de los comicios.

Por su parte, Ali Fawzi Rebaine, del partido nacionalista Ahd 54, defendió en Tipaza, al oeste de la capital, garantizar el trabajo de las asociaciones de derechos humanos en el país "al abrigo de las presiones políticas" y "restablecer la confianza de los ciudadanos en las instituciones".

Para las elecciones del jueves la Unión Africana (UA) ha enviado a Argel una misión de observación de un centenar de integrantes encabezada por el ex presidente de Mozambique, Joaquim Chissano.

"Nuestro papel será observar y dar nuestra opinión sobre la manera en que se desarrollará el escrutinio", dijo hoy Chissano en un comunicado y confió en que la elección se efectúe "en transparencia y en el respeto de las reglas democráticas".

También la ONU ha enviado una delegación de seguimiento compuesta de tres personas que, sin embargo, no tiene el carácter de observación electoral, ya que una misión en este sentido debe ser aprobada por la Asamblea General o el Consejo de Seguridad y la petición del Gobierno argelino llegó tarde para poder recabar esa autorización, según explicaron a EFE fuentes de la organización internacional.

El jefe de la delegación y presidente del Consejo Electoral de las Islas Mauricio, Abdul Rahman Irfan, precisó hoy que su misión es de "seguimiento e informe y no de observación" por lo que no realizarán "ninguna declaración sobre el proceso electoral".