La villa romana de La Olmeda renace sumando vanguardia y diseño a su historia

Pedrosa de la Vega (Palencia).-  El esplendor y el lujo que la villa romana de La Olmeda tuvo en el siglo IV, renace hoy en un nuevo edificio que une vanguardia e historia para convertir uno de los principales yacimientos arqueológicos del Bajo Imperio Romano que se conservan en Europa en un referente turístico.

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(EFE)

La villa romana de La Olmeda, un yacimiento arqueológico de los siglos IV y V, reabre sus puertas después de más de tres años cerrada por obras de instalación de cubiertas y acondicionamiento que han supuesto una inversión de más de 9 millones de euros.

La vanguardia y el diseño de la estructura que cierra y cubre los mosaicos de esta mansión romana, descubierta casualmente en 1968 en Pedrosa de la Vega (Palencia), cuando el agricultor Javier Cortes realizaba unas labores agrícolas, convierten desde hoy a La Olmeda en "el Guggenheim de lo romano".

Así se ha dado hoy a conocer a casi un centenar de periodistas procedentes de toda España invitados a la primera visita guiada organizada por la Diputación de Palencia desde que se iniciaron las obras hoy terminadas y que han mantenido cerrado este yacimiento durante tres años y cinco meses.

Dos días antes de su apertura al público, el próximo viernes, el presidente de la Diputación, Enrique Martín, ha mostrado su "inmensa alegría y satisfacción por ver la obra terminada, una promesa cumplida y un sueño realizado".

Martín ha destacado "el realce" que a partir de ahora tendrá el yacimiento arqueológico que pasó a ser gestionado por la Diputación de Palencia en 1980 cuando su descubridor y propietario Javier Cortes se lo cedió gratuitamente.

En su opinión, en la villa romana de La Olmeda "hay un antes y un después", y al valor arqueológico e histórico que ya tenía por ser uno de los yacimientos del bajo imperio romano más importantes y mejor conservados del mundo, se suma ahora el atractivo cultural y turístico de un edificio del siglo XXI.

"El edificio construido conjuga modernidad con historia y ofrece todos los servicios necesarios para ser un referente cultural y un atractivo turístico en Castilla y León", ha precisado Martín al recordar que el antiguo cerramiento no tenía ni luz artificial, ni agua corriente, ni aseos.

"Se puede decir que ahora el mundo romano está protegido en un edificio del siglo XXI", ha insistido Martín.

La villa romana ocupa una superficie de 4.400 metros cuadrados, con 31 habitaciones, un jardín, cinco pasillos, cuatro torres y dos pórticos, además de 10 estancias anexas a los baños, que ocupan una superficie de 900 metros cuadrados.

Ahora toda ella está cubierta por una estructura romboidal de hierro que pesa 700.000 kilos y cerrada por un edificio construido en hormigón y acero que se adapta con sus tonos rojizos al entorno ocre de la tierra en que se ubica esta mansión, en la vega de Saldaña.

El proyecto de los arquitectos Ignacio García y Angela García permite ver los 4.400 metros cuadrados de la villa de una sola vez y la única separación que hay entre las estancias son unas mallas metálicas que imitan con el lenguaje del siglo XXI los muros de las habitaciones de esta gran mansión, sin impedir una visión global de toda la villa en su conjunto.

El resultado final es un "espectacular" edificio que se integra perfectamente en el entorno y que está dotado de los volúmenes necesarios para "admirar lo que es y lo que fue esta villa", ha subrayado Martín.

Para el director de la excavación, José Antonio Abásolo, La Olmeda es uno de los yacimientos más importantes del Occidente Romano no sólo por la extensión que tiene la villa, sino por la regularidad de la planta y porque "también desvela la forma de vida de la clase aristócrata y de sus esclavos".

Todo sin olvidar los mosaicos que en ella se conservan, entre los que destaca el del Oecus, que representa en 175 metros cuadrados de teselas milimétricas la historia de Aquiles cuando es descubierto por Ulises en el palacio del rey Licomedes en la isla griega de Skyros.

En los próximos meses se desarrollará el proyecto museístico, que tiene un presupuesto de 400.000 euros y que incluye pantallas interactivas que ofrecerán una reconstrucción virtual de esta mansión romana, pantallas táctiles y paneles informativos, además de una maqueta de la villa para personas invidentes.

Un cafetería, una tienda, un salón de actos y una zona museística completan la oferta de este museo del siglo XXI situado en el medio del campo.