Los peruanos residentes en Chile indiferentes ante demanda porque "no acabará en guerra"

Santiago de Chile.-  Los peruanos residentes en Chile, que superan las 80.000 personas, "no están interesados" en la demanda interpuesta por Perú en la Corte Internacional de Justicia porque "la mayoría piensa que no acabará en guerra", dijo hoy a Efe Víctor Paiba, portavoz del colectivo.

Según el dirigente, existe un gran desconocimiento a nivel popular de la acción que Perú ha emprendido contra Chile, y acusó a los Gobiernos de ambos países de levantar polémica con la interposición de esta demanda, que a su juicio, les sirve para ocultar otros graves problemas sociales.

Para Paiba, la comunidad peruana que reside en Chile no se verá afectada por el resultado de la demanda, ya que "con el tiempo se aclararán" los argumentos, y expresó su deseo de que tanto Chile como Perú respeten el veredicto final de los jueces.

Perú demandó a Chile ante la CIJ, máxima instancia judicial de Naciones Unidas, para que esa corte reconozca su tesis de que el límite marítimo entre los dos países no ha sido fijado antes, mientras Santiago considera dicha frontera establecida por tratados suscritos en la década de 1950 y plenamente vigentes.

Rigoberto Rufino, trabajador peruano que ha visto nacer a sus hijos en Chile, manifestó a Efe la necesidad de unidad entre los países latinoamericanos en conflictos de este tipo.

Otros opinan que se trata de demandas ajenas al pueblo peruano, como Carlos Rodríguez, quien vende comida típica peruana frente al consulado de su país en Santiago, y opina que su pueblo "no tiene nada que ver con las peleas entre congresistas por el mar".

"Si Chile gana, habrá rencillas contra los peruanos, de la misma forma que si gana Perú. Son conflictos de tierras y siempre pueden provocar más conflicto", dijo Rodríguez.

Elvira Guaroto, ciudadana peruana residente en Chile, manifestó su miedo a que el resultado de la demanda aumente la discriminación hacia su colectivo, mientras que el pensionado (jubilado) peruano Guillermo Augusto se mostró confiado en las competencias del tribunal internacional y aventuró un veredicto.

"Si hay una Corte Suprema que dirime las diferencias, que actúe. Ya verán como lo dividirán y le tocará la mitad del triángulo (de terreno marítimo) a cada uno", dijo Augusto.

Por su parte, Dante de los Santos se quejó de la actitud del Gobierno peruano y aseguró que "está de más que haya estas diferencias".

"Uno como ciudadano quisiera vivir en hermandad con sus vecinos. Todos los peruanos pensamos que las diferencias quedaron zanjadas (con Chile)", afirma De los Santos, quien acaba de volver a Santiago tras trabajar en la recogida de la uva durante el verano.

El litigio por los límites marítimos entre Perú y Chile inició ayer su parte escrita con la presentación de la memoria peruana ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ), generando reacciones de políticos y personalidades en ambos países.

Se trata solo del inicio de un largo proceso que culminaría, como pronto, a comienzos del año 2012, cuando la CIJ emita una sentencia que, según el embajador de Perú en Holanda y agente ante la CIJ, Allan Wagner, tanto Lima como Santiago están "comprometidas" a aceptar, ya que además, el fallo tiene carácter inapelable.

Perú basa su pretensión en el argumento de que el límite marítimo con Chile nunca ha sido fijado, lo que es rechazado por su vecino, que esgrime dos tratados al respecto, suscritos en 1952 y 1954, que fueron respetados por Lima durante 50 años para sostener ahora que se trata solo de acuerdos pesqueros.