Sanz anuncia que se intentará que la playa cretácica esté lista en verano

Enciso (La Rioja).-  El presidente del Gobierno riojano, Pedro Sanz Alonso, ha afirmado hoy que la primera fase del parque de paleoaventura "El Barranco Perdido", en Enciso, se abrirá el verano próximo, con el deseo de que también pueda hacerlo la "playa cretácica", formada por piscinas y divertimentos acuáticos.

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(EFE)

El presidente de La Rioja, Pedro Sanz. EFE/Archivo

Sanz Alonso ha visitado hoy las obras del parque junto a la consejera de Turismo, Aránzazu Vallejo, los alcaldes de Enciso, Rafael Lafuente, y Arnedo, Juan Antonio Abad; y el responsable del proyecto, Mariano Esteban.

Sanz Alonso ha recordado que las obras que se realizan en la actualidad tienen un presupuesto de 3,5 millones de euros, englobados en la primera fase del parque, que asciende a unos ocho o diez millones, cifra a la que habrá que sumar la segunda parte de "El Barranco Perdido".

Este parque temático, ha añadido, contribuirá a convertir el patrimonio paleoicnológico de La Rioja en un relevante recurso turístico, que se unirá a la senda termal de Grávalos, Arnedillo y Cervera del Río Alahama y a la zona de la Reserva de la Biosfera.

Sanz Alonso ha visitado las obras de la primera fase del parque, donde ha escuchado las explicaciones del responsable del proyecto, quien ha aludido al respeto medioambiental que se mantiene y al aprovechamiento de los materiales para su reutilización en la segunda fase y en el mantenimiento sostenible del espacio.

La Consejería de Turismo ha realizado un estudio hidrogeológico para determinar la cantidad necesaria de agua para el funcionamiento del parque y garantizar el suministro a Enciso.

También se usará un sistema avanzado de desinfección del agua en las piscinas, mediante rayos ultravioleta, que evitará el picor en los ojos tras el baño; además de que esta "tecnología de vanguardia", según Esteban, facilita la depuración y el tratamiento posterior del agua.

Toda el agua eliminada en la renovación de los vasos será tratada y reutilizada en jardinería y en usos que no requieran agua potable, por lo que diariamente se recuperarán 33 metros cúbicos de agua de los 43 necesarios para el correcto funcionamiento del parque.

"Las obras avanzan a buen ritmo y prácticamente están terminados los desmontes de tierra y muros de contención; además de que se avanza en la construcción del edificio de acceso, aparcamiento, anfiteatro, restaurante y la playa cretácica", ha subrayado.

La previsión es que una única entrada permitirá acceder al Centro de Interpretación de Enciso, a las visitas guiadas a los yacimientos de icnitas -huellas fosilizadas de dinosaurios- y al parque, que se construye sobre una superficie de 7.500 metros cuadrados.

El alcalde de Enciso ha confiado en que los visitantes puedan bañarse el próximo verano en las piscinas públicas de "El Barranco Perdido", que contribuirá al mantenimiento del pueblo y favorecerá el desarrollo económico y turístico de la zona.

Sanz Alonso ha recordado que "El Barranco Perdido", a diferencia de otros espacios temáticos, se concibe como un parque de paleoaventura, que permitirá a los visitantes transformarse en paleontólogos, geólogos o arqueólogos y buscar restos, fósiles y restos óseos en una excavación abierta; identificar y clasificar diversos hallazgos o ayudar a reconstruir esqueletos.

A ello ha añadido que el parque dispone de los propios recursos naturales de las icnitas, a lo que se unirá una oferta de actividades compuesta por itinerarios, juegos de destreza y habilidad, pruebas físicas, atracciones variadas y animación; así como una zona de baños, restauración, merenderos y descanso.

La zona de aparcamiento ocupará una superficie de 1.120 metros cuadrados y se dotará a este espacio de una caracterización que haga percibir al visitante que ha entrado en el campamento paleontológico.

El diseño del edificio de accesos, con una superficie de 835 metros cuadrados y de planta elíptica, tendrá un carácter simbólico con referencias, por su forma y escala, a los grandes saurios que poblaban la región.

La Rioja es la región española con más icnitas encontradas y documentadas y por su número y conservación constituye el territorio paleontológico de icnitas más importante del mundo, ya que tiene unas trece mil huellas estudiadas, que se localizan en 110 yacimientos censados y repartidos por veinte términos municipales.