Un miembro de Acción Directa cuenta su actividad en España a comienzos de los 70

París.-  Jean-Marc Rouillan, un destacado miembro del grupo terrorista francés de extrema izquierda Acción Directa, cuenta en un libro su actividad antifranquista en Cataluña a comienzos de la década de los años 70 en el Movimiento Ibérico de Liberación (MIL) junto al anarquista Salvador Puig Antich.

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(EFE)

Jean-Marc Rouillan, un destacado miembro del grupo terrorista francés de extrema izquierda Acción Directa, cuenta en un libro su actividad antifranquista en Cataluña a comienzos de la década de los años 70 en el Movimiento Ibérico de Liberación (MIL) junto al anarquista Salvador Puig Antich. En la imagen, retrato del anarquista catalán Salvador Puig Antich, ejecutado a garrote vil en marzo de 1974. EFE/Archivo

"Le deuil de l'innocence: un jour de septembre 1973 à Barcelone", que sale a las librerías el próximo día 17, se centra en las últimas semanas del MIL, cuando se produjo el arresto de Puig Antich, ejecutado en 1974 tras ser condenado a garrote vil por la muerte a tiros de un policía, responsabilidad que su familia ha negado para intentar anular la condena.

Rouillan, que cumple dos condenas a cadena perpetua en Francia por su implicación en diversos atentados de Acción Directa, explica en ese segundo volumen de sus memorias, que el MIL actuaba "esencialmente en Cataluña, con bases de repliegue en la región de Toulouse" y que él en ese tiempo se consideraba entonces un "guerrillero urbano".

Logró escapar a la presión policial que acabó con el grupo, y huir a Francia con un compañero a través de los Pirineos.

El terrorista francés fue amnistiado en 1977 En España por todos los hechos que relata cometidos en Cataluña, y explica que tras el desmantelamiento del MIL participó en la fundación de los Grupos de Acción Revolucionaria Internacionalista (GARI).

Según su propia versión, los GARI pretendían "luchar con la acción directa contra la dictadura franquista, contra el capital, contra el Estado por la liberación de España, de Europa, del mundo"

Este comando organizó a mediados de la década de los años 70 una veintena de atentados, esencialmente contra intereses españoles en Francia, y Rouillan fue condenado por algunos de ellos a dos penas de cárcel en 1975 y 1976, que lo mantuvieron entre rejas hasta mayo del año siguiente.

A su salida entonces de prisión, comenzó su actividad en Acción Directa que condujo a su detención definitiva en febrero de 1987 junto a otras dos de sus activistas más destacadas, Nathalie Ménigon y Joëlle Aubron.

Desde entonces ha estado encarcelado, salvo entre diciembre de 2007 y octubre de 2008, cuando obtuvo un estatuto de semilibertad que le fue revocada al conceder una entrevista cuyo contenido fue interpretado como una falta de arrepentimiento por los asesinatos del presidente de Renault, Georges Besse, y del ingeniero general del armamento de Francia, René Audran.

Su editor Thierry Discepolo, señala que los libros de Rouillan "responden a la cuestión que no tiene derecho de responder: ¿cómo y por qué se toman las armas?".

En declaraciones publicadas hoy por "Libération", Discepolo insiste en que "cuanto más en desacuerdo se está con la lucha armada, más hay que tratar de entender por qué alguien apuesta por ella".