Blanco reconoce errores en Galicia y descarta que hubiera influencia de la política nacional

Madrid.-  El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha admitido hoy que se han cometido "errores" en Galicia, que deben ser reconocidos, analizados y asumidos, aunque ha descartado que en los adversos resultados haya podido influir la coyuntura política nacional.

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(EFE)

El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, durante la rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva del PSOE, hoy en Madrid.

Después de la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal, Blanco ha sido solidario en la derrota en Galicia y en el éxito cosechado por el PSE en el País Vasco, y ha querido reconocer públicamente el trabajo, la dedicación y la honestidad política y personal del candidato socialista a la Xunta, Emilio Pérez Touriño, quien hoy ha presentado su dimisión como secretario general del PSdeG.

Según ha explicado, el presidente gallego en funciones ya tenía pensado firmemente anoche presentar su dimisión, aunque prefirió no hacerlo ante la prensa y formalizarla hoy ante sus compañeros de partido.

Así se lo ha hecho saber esta misma mañana por teléfono a Blanco, que ha opinado que se trata de una determinación que le honra.

Blanco ha negado su intención de optar a la Secretaría General del PSdeG, ha subrayado que la única tarea que le ocupa en estos momentos es la de ser vicesecretario general socialista y ha avanzado que en un par de meses puede convocarse un congreso extraordinario.

"Yo también asumo la cuota de responsabilidad que tengo como gallego y como dirigente nacional del PSOE", ha proclamado en rueda de prensa, antes de apuntar que, aunque habrá que ver en qué medida la crisis económica pudo haber influido en los resultados, una de las principales razones del fracaso ha sido que la política realizada por la Xunta, que "había despertado mucha ilusión", no suscitó al final la confianza o la gente esperaba más de ese cambio.

De otra manera, ha agregado, no se puede entender que el PSOE obtenga en Galicia casi el mismo resultado que hace cuatro años y, en cambio, suba ocho puntos en el País Vasco.

Así las cosas, ha puesto el acento en la bajada de respaldo popular que han cosechado los dos partidos que han gobernado en los últimos cuatro años -PSdeG y BNG-, de tal manera que los gallegos han emitido "un voto crítico respecto al periodo político cerrado".

Y no ha ocultado que él había sugerido hace meses a Touriño la posibilidad de un adelanto electoral, consejo que finalmente fue rechazado por el presidente de la Xunta pensando "en el interés general".

Una vez que se escrute el voto del exterior, Blanco ha vaticinado que el PSdeG obtendrá finalmente 25 escaños, con lo que mantendría su actual representación parlamentaria, mientras que su socio de gobierno, el BNG, no ha podido revalidar sus resultados.

El dirigente socialista ha expresado su felicitación al PP por su triunfo en Galicia y la ha extendido a su líder, Mariano Rajoy, si éste "se apropia del éxito y lo considera un éxito nacional y cree que le afianza en el liderazgo" del partido.

Ha confesado, a este respecto, su "especial querencia" por que Rajoy continúe el frente del PP.

Blanco ha reconocido además que se implicó "a fondo" en los comicios gallegos, pero ha argumentado siempre se implica en todas las campañas electorales porque es su obligación como dirigente nacional del partido.

Con todo, ha juzgado que ahora todos deben analizar los resultados y abundar en sus causas, sobre todo para encontrar el camino que les permita de nuevo dentro de cuatro años recuperar la confianza de los ciudadanos y volver a gobernar en la Xunta.

Pero Blanco no quiere dejarse "llevar por la intuición" a la hora de hacer un balance de las elecciones gallegas, sino constatarla con hechos objetivos, razón por la cual se ha comprometido a efectuar un amplio estudio postelectoral, que profundice en las causas.

"Hay que saber diagnosticar bien" para tomar el camino correcto que lleve a recuperar la confianza de la mayoría, ha observado.

No obstante, ha precisado que los socialistas gallegos tendrán que hacer autocrítica para conocer qué factores les han conducido a esta situación, para "inmediatamente después" proceder a un trabajo colectivo que permita poner en pie un nuevo proyecto político.

Para esa tarea, el PSdeG "contará como siempre con el respaldo y la colaboración de la dirección federal", ha prometido Blanco.