El democristiano Dario Franceschini nuevo líder de Partido Demócrata italiano

Roma.-  Dario Franceschini, de 50 años, fue elegido hoy nuevo secretario general del Partido Demócrata (PD), principal grupo de la oposición italiana, con lo que se cierra la crisis abierta por Walter Veltroni, quien dimitió del cargo el pasado día 17 tras la derrota sufrida en los comicios regionales de Cerdeña.

Franceschini fue elegido con los votos de 1.047 de los 1.258 delegados de la Asamblea Nacional del PD, reunida en el parque ferial de la capital "Fiera di Roma" para buscar una salida a la crisis desatada en el joven partido, de apenas un año de vida.

A la secretaría de la formación aspiraba también el ex ministro italiano de Defensa Arturo Parisi, que sólo obtuvo 92 votos y que abogaba por nuevas elecciones primarias como fórmula para designar al líder del PD.

Dario Franceschini, hasta ahora "número dos" del PD, proviene del área democristiana de la coalición de centro izquierda "La Margherita", que se fusionó con el ex comunista Democráticos de Izquierdas (DS) para crear el Partido Demócrata.

El nuevo líder del PD se mantendrá en el cargo, según dijo hoy, hasta octubre próximo, cuando se celebrará el primer congreso de la formación.

Considerado por los analistas políticos un "gemelo", "clon" o "alter ego" de Veltroni, Franceschini pronunció hoy un enérgico discurso en el que reconoció que el partido vive una grave crisis, pero se mostró convencido de que saldrán de ella con las ideas progresistas reafirmadas.

Para ello pidió el apoyo de todos y aseguró que aceptó la candidatura como "un mandato de servicio" y no por una cuestión personal, por lo que su trabajo concluirá en octubre, cuando se celebre el primer congreso del PD.

"He sido descrito como débil, como un aficionado, un don nadie y muchos me dijeron que hiciera hoy un discurso emotivo para atraerme a la Asamblea. Pero este no es el momento de las emociones, sino el de la verdad", agregó Franceschini, quien explicó que gestionará esta fase para afrontar las elecciones europeas de junio y garantizar el desarrollo del congreso de octubre.

Reivindicó que el PD es "hijo del Olivo", la coalición de centro izquierda que lideraba Romano Prodi, y se mostró a favor de construir una nueva alianza centro-izquierdista, con la que pueda colaborar el partido centrista democristiano UDC.

Franceschini indicó que disolverá el actual "gobierno en la sombra" del PD y abogó por apoyar la ley que eleve hasta el cuatro por ciento el porcentaje mínimo de votos que deben lograr los partidos para tener representación en el Parlamento Europeo.

Sobre el PD anunció que pondrá en marcha nuevas formas de colegialidad, para que participen en las decisiones más importantes los alcaldes del partido y los secretarios regionales.

Asimismo, aseguró que lo primero que hará será ir a su ciudad, la norteña Ferrara, y delante del Castillo Estense, lugar donde los nazis llevaron a cabo una matanza de civiles en 1943, jurará fidelidad a la Constitución italiana en el ejemplar que de la Carta Magna tiene su padre, un antiguo partisano de 87 años.

Franceschini atacó duramente al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, del que dijo que no quiere gobernar, sino convertirse en el dueño de Italia.

"Berlusconi tiene en mente una forma moderna de autoritarismo. No quiere gobernar el país, sino ser el patrón de Italia. El Parlamento le estorba, así como el papel garantista del presidente de la República", denunció.

Además, añadió, "llega al cinismo de atacar la Constitución aprovechando que una muchacha estaba muriendo (Eluana Englaro) y aprovecha el miedo para legalizar las rondas callejeras contra todos los derechos humanos".

Franceschini agregó que Berlusconi ofende la Constitución y desprecia los principios de la democracia.

Tras conocer su elección, desde las filas del gubernamental partido de Berlusconi, el PDL, se levantaron voces como la de Denis Verdini, coordinador de la formación en Florencia, quien dijo que, si Franceschini representa "lo nuevo que avanza, pobre PD".