La sección Arte inVisible plantea un desafío estético al continente africano

Madrid.-  La cuarta edición de Arte inVisible, presentará mañana en ARCO un reflejo de las estéticas contemporáneas africanas, un desafío al continente "en términos estéticos" a través de la mirada de sus artistas, ha dicho hoy la comisaria de la muestra, Elvira Dyangani.

El proyecto Arte inVisible, impulsado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ofrece, en su cuarta edición, una reflexión sobre la "visibilidad" del arte africano y pretende acercar a los artistas a los canales de comercialización del arte.

Antoni Nicolau, director de relaciones culturales y científicas, ha afirmado hoy que el objetivo de Arte inVisible es "luchar contra la exclusión y la estigmatización del arte africano".

Nicolau planteó hasta qué punto "ha sido el mercado occidental el que ha estigmatizado la creación africana, marginando la capacidad creativa contemporánea que podrían tener los jóvenes africanos".

El espacio expositivo -que se abrirá al público mañana- se compone de fotografía, videoarte, instalación y performance, junto con un centro de documentación sobre arte contemporáneo africano, todas obras de jóvenes artistas africanos.

Elvira Dyangani, guineana afincada en España, ha explicado que se trata de la primera edición de Arte inVisible en la que no hay división por países, porque "por mucho que se exponga África, jamás se abarca su totalidad".

"Africa no es solo un continente, sino también la expansión de ideas y modos de entender la cultura y la sociedad que trascienden los términos geográficos y hay tantos artes africanos como artistas".

Rana el Nemr, Claudia Cristovao, Nontiskelelo Veleko y algunos colectivos ofrecerán en ARCO un espacio de interacción con el público rebatiendo la idea del "carácter nacional del arte", según Dyangani. "Podríamos pensar que las obras proceden de cualquier lugar", ha insistido.

La comisaria ha explicado que esta edición otorga más importancia a los "artistas visuales" para dar cuenta del desafío estético que pretende la muestra y de "lo que todo el mundo espera ver de África".

La cuarta edición de Arte inVisible intenta dar más protagonismo a las mujeres -sólo hay dos hombres- y refleja que "las identidades africanas están en tránsito" para poder olvidar conceptos preconcebidos.

La Secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez, ha señalado que la muestra refleja las dos direcciones que sigue actualmente la cooperación cultural: "saber, conocer y potenciar la creación cultural en los países de desarrollo" e "impulsar un proceso de enriquecimiento mutuo".

A la presentación de Arte inVisible en la sede de la AECID acudieron dos de las artistas de la muestra, Zipho Dayile del colectivo sudafricano Gugulective, y la angoleña Claudia Cristovao.

Dayile, que presenta la serie de fotografías "Untitled", consideró un reto, como fotógrafa, este proyecto que no cree deba "encasillarse" como arte africano y comentó que al trabajar con la realidad, "encontrar el equilibro entre lo visual y lo invisible es muy complejo".

Cristovao, que acude con una videoinstalación titulada "Fata Morgana", aplaudió que la iniciativa muestre la especificidad de los artistas, pues cree que este aspecto de la creación debe ser más reconocido y protegido.