La Unión Africana impone sanciones a la junta militar golpista de Mauritania

Addis Abeba.-  La Unión Africana (UA) ha impuesto sanciones a la junta militar que ocupa el poder en Mauritania desde el golpe de estado del 6 de agosto del pasado año, según un comunicado difundido hoy.

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(EFE)

El líder libio, Muamar Gadafi (i), y el presidente de la Comisión de la Unión Africana, Jean Ping, responden a las preguntas de los periodistas durante la rueda de prensa celebrada con motivo de la clausura de la Cumbre de la Unión Africana (UA), en Addis Ababa (Etiopía), el 4 de febrero pasado. EFE/Archivo

La nota, firmada por Manuel Domingo Augusto, embajador de Angola y jefe del Consejo de Paz y Seguridad de la UA, señala que se ha impuesto una prohibición de viajar a los miembros de la junta, por lo que se les denegarán los visados y se congelarán sus cuentas en los demás países de la organización, formada por 53 estados.

"El Consejo ha solicitado a todos los países miembros que apliquen escrupulosamente estas resoluciones", dice el escrito del Consejo de Paz y Seguridad, que pide también a la Comisión, el órgano ejecutivo de la UA, que tome las medidas necesarias para que sea efectiva e informe de su cumplimiento.

La entrada en vigor de las sanciones debe estar acompañada, según el Consejo, por esfuerzos de la UA y otros países, implicados en la resolución de la crisis mauritana, para conseguir un "rápido retorno al orden constitucional" en ese país.

El pasado 29 de enero, la Comisión de la Unión Africana mostró su intención de imponer sanciones a los militares y civiles que mantienen un estado inconstitucional en Mauritania, al no observar medidas para retornar al orden constitucional.

En el encuentro de la capital etíope, presidido por el presidente de la Comisión, Jean Ping, participaron representantes de la Liga Árabe, de la ONU, la Organización de la Conferencia Islámica, la Organización Internacional de la Francofonía y la Unión Europea, implicadas en la solución del conflicto.

Los reunidos manifestaron su "profunda preocupación" por la reanudación de los golpes de estado en África, donde el pasado 23 de diciembre se produjo otro dirigido por militares en Guinea Conakry.

Por ese motivo, la UA solicitó apoyo a la ONU para dar carácter general a eventuales sanciones a los responsables del régimen de facto mauritano y de otros regímenes golpistas.

Entre las exigencias no cumplidas por los golpistas está la liberación incondicional del depuesto presidente mauritano, Sidi Ould Cheikh Abdallahi, que debe ser incluido en la búsqueda de una solución a la situación del país con respeto a su Constitución.

Abdallahi, que se encontraba bajo arresto domiciliario en su pueblo natal, Lemden, situado a unos 250 kilómetros de Nuakchot, fue liberado el 21 de diciembre, pero los militares no le permiten trasladarse a la capital.

La UA y el resto de organismos implicados en la solución de esta crisis esperan unas elecciones presidenciales "libres y justas", aceptables para todos los ciudadanos del país y la comunidad internacional.

Los militares golpistas han planteado unas elecciones presidenciales para el 6 de junio que aceptó Adallahi, siempre que los militares dejen el poder de forma definitiva.

Sin embargo, el general Mohamed Uld Abdelaziz, líder de la junta militar que controla el país, será candidato en esos comicios, según dijo ayer a Efe una fuente cercana al militar.

Hasta el momento, la única candidatura presentada de manera oficial por una personalidad política de prestigio en el país es la de Mohamed Yehdhih Uld Moctar, presidente del Partido mauritano de la Alternativa.

Las elecciones serán boicoteadas por el Frente Nacional para la Defensa de la Democracia (FNDD), leal a Abdalahi y que agrupa a partidos y a políticos opuestos a las autoridades golpistas, como el presidente del Parlamento, Mesud Uld Buljeir.

Otro de los principales partidos del país, la Agrupación de Fuerzas Democráticas (RFD) de Ahmed Uld Dadah, también podría unirse al boicot, ya que ha exigido que se prohíba a los miembros del Ejército y de las fuerzas de seguridad presentarse a las elecciones.