El mexicano Javier Aguirre reconoció hoy, en su despedida del Atlético de Madrid, que "siempre hay dolor" en una destitución, pero añadió que se va con la "conciencia tranquila" y con orgullo de haber formado parte de un gran club y admitió que en diciembre no se hubiera imaginado esta escena. El técnico, sustituido en el cargo por Abel Resino, cerró hoy su etapa de dos temporadas y media en el club rojiblanco. Tiempo: