"Fuck Bush, fuck Obama": el rap iraquí que suena en Madrid

Sus canciones caen como proyectiles, imitando a las bombas sobre Gaza de las que habla. Tom Sa'id modula ritmos de rap, hip-hop y grime en torno a sus implacables versos sobre violencia, Irak, el orden político global, las víctimas de las guerras, el mundo árabe. A los 25 años, este joven árabe-cristiano de padre iraquí y madre británica grita su pesimismo fuck george bush/it aint gonna change/fuck obama/fuck mcain, en vídeos caseros grabados en el barrio madrileño de Delicias, donde reside, y que después llegan a sus seguidores en su país natal, Reino Unido, pero también en Siria, Turquía, Estados Unidos y España, a través de YouTube.

"No creo que las cosas vayan a cambiar mucho. La situación está peor que nunca en algunos lugares. Pero no canto sólo sobre enfrentamientos y agresiones en los países árabes; también hablo de cosas positivas de la vida diaria", explica. "Lo que me interesa es dar voz a las gentes de Irak, Palestina o Siria, donde tengo familiares y amigos, para que el resto del mundo les escuche".

Este Licenciado en Geografía Humana por la Universidad de Leicester parece obsesionado por completar la Historia contemporánea que legaremos al futuro "por si los libros dejan capítulos fuera o cuentan episodios incompletos". Tom, que escribió su tesis de graduación sobre la geopolítica del agua en Palestina, quiere contribuir a la crónica de esta región aportando todos los detalles que pueda: "Siempre es posible contar algo desconocido, nuevo", insiste. "Yo quiero que la gente escuche historias sobre esa parte del mundo para que se interese y con suerte investigue un poco por su cuenta sobre lo que está ocurriendo de verdad".

No es que desconfíe de los medios o de otras fuentes informativas, pero cree que su perspectiva puede aportar matices interesantes además de resultar didáctica, "casi como una clase", porque se remonta al pasado mucho más que cualquier otra crónica de actualidad. "Cuando hablo de la violencia en Irak, empiezo con la década de los ochenta y me refiero al belicismo contra Irán, a la primera Guerra del Golfo, a los motivos por los que estallaron estas guerras y a sus consecuencias", dice.

¿Un rapero académico? ¿No es esa una combinación un tanto extraña? "En Estados Unidos a mucha gente no le gustaría este tipo de rap político, porque allí suele versar sobre cochazos, dinero y mujeres", dice. "Pero en Inglaterra es más mezclado y aborda cuestiones de actualidad. Me llegan comentarios muy halagüeños del público inglés y, por lo que sé, en España el hip-hop trata también temas de fondo. Creo que puede conectar bien con los españoles".

En el Reino Unido, Tom cuenta además con un grueso generacional que, como él, tiene orígenes iraquíes, de Oriente Medio, descendientes de parejas mixtas que pueden identificarse con las experiencias de Tom, reconocer las vivencias de un presente violento y un pasado mítico: "Mi padre solía relatarme sus recuerdos de Bagdad, y cómo era un lugar muy relajado; me hablaba de los picnics familiares junto al río, y de cuánto disfrutaba de las festividades de los musulmanes, no desde el punto de vista religioso, sino vecinal, de la comunidad".

Tom es consciente de que sus vídeos (ya ha publicado una decena pero tiene más de 20 en preparación) alcanzan con facilidad a sus coetáneos de Bradford pero no tanto a los veinteañeros de la región que más le ocupa: "En Siria, donde he vivido algún tiempo, no es siempre fácil acceder a mis vídeos porque hay algunas formas de censura en internet y no está abierto a todo el mundo. El caso de Irak es distinto. Allí, como en Gaza, apenas queda infraestructura, la mayoría de la gente no tiene internet".

Sobre todo, quiere mantener fresco en la memoria de Occidente el sufrimiento de los pueblos, porque se queja de que, una vez fuera de los titulares, los conflictos se olvidan pronto. "Me temo que la gente empieza a olvidarse de Gaza, como ha ocurrido con Irak. Out of sight, out of mind. (Ojos que no ven, corazón que no siente). Creo que si grabase un álbum, elegiría ese proverbio como título".