WASHINGTON.- El ex senador demócrata por el estado de Delaware Joe Biden se ha convertido hoy en el vicepresidente de Estados Unidos, sucediendo así a Dick Cheney en un cargo que ha ido aumentando en importancia con el tiempo a medida que las funciones del presidente también se incrementaban.
El ex senador demócrata por el estado de Delaware Joe Biden se ha convertido hoy en el vicepresidente de Estados Unidos, sucediendo así a Dick Cheney en un cargo que ha ido aumentando en importancia con el tiempo a medida que las funciones del presidente también se incrementaban.
De hecho, la imagen pública de los vicepresidentes ha ido destacando cada vez más en los últimos años y muchos de los elegidos se atreven después a presentar su propia candidatura a la Casa Blanca. El caso más reciente es el de Al Gore, vicepresidente con Bill Clinton.
Los últimos en ocupar el puesto, el mismo Gore y el republicano Cheney con George W. Bush, ostentaron poderes antes desconocidos para los vicepresidentes, lo que previsiblemente ocurrirá en este nuevo mandato que comienza el próximo mes de enero. Según algunos analistas, a principios de la Administración Bush el cargo de vicepresidente se está acercando hacia el de primer ministro, en alusión a sistemas políticos como el francés.
Esta evolución dentro de la Casa Blanca ha conllevado una mayor exposición pública de los candidatos a vicepresidentes y de los después elegidos, por lo que la opinión pública es cada vez más crítica con los que podrían ser futuros presidentes del país.
Pero en realidad, en las 11 convocatorias electorales entre 1960 y 2000, sólo dos vicepresidentes se convirtieron en jefes del Estado por muerte o dimisión del mandatario: fueron los casos de Lyndon Johnson en 1964 por el fallecimiento de John F. Kennedy y Gerald Ford por la renuncia de Richard Nixon en 1976 tras el escándalo del Watergate.
A muchos sorprendió que Barack Obama nombrara a Joe Biden como su compañero de fórmula de cara a las elecciones de noviembre. Biden, quien se presentó también a las primarias, de las que se retiró tras sus pobres resultados en los 'caucus' de Iowa --que precisamente ganó Obama--, representa la línea más conservadora del Partido Demócrata, un sector que Obama todavía tenía que ganarse cuando fue elegido oficialmente candidato.
En los sondeos, y aunque mantuvo en el pasado algunas discrepancias con Obama --como la guerra de Irak, por la que votó a favor en el Congreso--, la mayoría de los estadounidenses han valorado muy positivamente la experiencia de Biden, sobre todo en lo que respecta a sus conocimientos sobre las relaciones internacionales.
Esta experiencia, traducida en su carrera de más de 30 años como senador por Delaware, unido a sus orígenes de clase modesta y a su vida personal --su mujer y su hija fallecieron en accidente de tráfico en 1972--, le han hecho ganarse las simpatías de los electores, aunque su carácter en ocasiones pretencioso le han acarreado también algunas críticas.
En cualquier caso, la opción de Biden fue considerada por muchos como un retroceso en el mensaje de cambio lanzado por Obama durante las primarias, pero es cierto que la figura del senador por Delaware hizo que la candidatura demócrata se ganara a las bases más conservadoras del partido y a gran parte de la clase media y media-alta.
Selección de temas realizada automáticamente por
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Citar este verso de Machado no puede ser más ocurrente al hablar de Mariano Rajoy. Tras la renuncia de Zapatero y las voces que señalan que la estrategia popular podría verse dañada, es necesario preguntarse algo. ¿Ha hecho camino Rajoy? ¿Se ha preparado para ser presidente? Quizás la respuesta sorprenda.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Algunos luchamos por tener los pies en suelo.” Lo decía ayer en su Twitter Raül Romeva, uno de los cuatro eurodiputados españoles (Oriol Junqueras, de ERC, Ramon Tremosa, de CiU, Rosa Estarás del PP y él, de ICV) que apoyaron la enmienda para evitar que el presupuesto comunitario de 2012 contemple los vuelos en primera clase de los parlamentarios europeos. No era una excepción. Lo escribía ahí porque es lo que hace siempre: ser transparente.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Son los cien primeros, como podrían ser doscientos o diez. Lo importante es el concepto. La idea de tener unos días para llevar a cabo la transición desde la oposición al gobierno. Del banquillo, a llevar el dorsal titular. Nunca tendremos una segunda oportunidad de crear una buena primera impresión. Y los cien primeros días son esa primera impresión. Veamos su importancia.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Os propongo que sea el Comité Federal, en la próxima reunión que tengamos, después de las elecciones autonómicas y municipales, el que fije el momento de activar el proceso de primarias previsto en los Estatutos del partido para elegir nuestra candidatura a las próximas elecciones generales.” De esta manera, Zapatero ha puesto las primarias en el punto de mira tras anunciar que no será candidato a la reelección. Tras este anuncio, observamos algunas reflexiones sobre el proceso
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.