Una afectada por la alergia por calzado chino relata que su pié creció tres tallas y se cubrió de granos

Vitoria.-  Marga Santamaría, una de las afectadas por la alergia producida por calzado chino, ha explicado a EFE que cuando se quitó el calzado, su pie "había crecido tres tallas, había enrojecido y estaba cubierto de granos".

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(EFE)

Una afectada por las reacciones producidas por el dimetilfumarato, un fungicida que produce reacciones alérgicas graves en la piel y que se incluía en los zapatos de la marca de calzado chino "Amelia Zaragoza".

Mes y medio después, todavía no ha conseguido que remita la alergia al cien por cien, ha explicado Santamaría, vecina de Vitoria y promotora de la plataforma de afectados por la alergia producida por calzado chino.

En una entrevista concedida a EFE,, ha denunciado que hay afectados a quienes no se les ha hecho caso en las oficinas de consumo y ha opinado que si se les hubiera prestado atención, no habrían aparecido nuevos casos.

El Ministerio de Sanidad y Consumo ordenó ayer la retirada del mercado de la marca de calzado chino "Amelia Zaragoza", distribuido por la empresa New Arian (Valencia), que se vende con unos sobres de dimetilfumarato, una sustancia que produce reacciones alérgicas graves en la piel.

El dimetilfumarato es un potente fungicida y acompaña a estas botas, zapatos y zapatillas dentro de unos sobres similares a los de sílice que actúan como secantes.

Santamaría ha explicado que el pasado 2 de noviembre se compró unas botas en una tienda de moda de Valladolid, su ciudad natal, y que a las pocas horas de llevarlas puestas empezó a notar picor en el pie izquierdo.

Cuando se quitó el calzado, su pie había crecido tres tallas, había enrojecido y estaba cubierto de granos.

Además de acudir al especialista, que le recetó antihistamínicos, corticoides y antibióticos, fotografió su pie y colgó la imagen en Internet (www.todoalergias.com) junto con la foto de las botas, que supuestamente le habían causado la dermatitis.

Paralelamente, tramitó una denuncia ante la oficina de consumo, primero en Vitoria y más tarde en Valladolid, ya que la botas las había comprado en esta ciudad.

Santamaría ha advertido de que después del suyo han aparecido muchos más casos en diversos puntos de España y ha criticado que "hay afectados a los que no se les ha hecho caso en las oficinas de consumo cuando empezaron a presentar quejas a principios de noviembre".

En este sentido, ha advertido de que "si se les hubiera prestado atención en ese momento, no habría dado lugar a los afectados que han ido apareciendo posteriormente".

Ha recordado que también hay otros productos infectados por dimetilfumarato, como sofás, y ha dicho que dos personas de Murcia se encuentran en esta situación y están "indignados" porque pusieron el caso en conocimiento de las autoridades sanitarias y de los medios de comunicación y "nadie les ha hecho caso".

Tras ser víctima de esta alergia, para ella "comprar calzado es una aventura" y ha aconsejado a los consumidores que se cercioren de lo que compran y de que el calzado que van a adquirir cumple la normativa de etiquetado.

Ella no compró sus botas en un bazar chino, sino en una tienda de una cadena española, como varios de los afectados, ha precisado.