Telefónica quiere compartir las nuevas redes, pero a precio de mercado

Madrid.-  El consejero delegado de Telefónica, Julio Linares, dijo hoy que esta operadora está interesada en ofrecer todas sus redes para compartirlas con los operadores alternativos, incluso las de nueva generación, pero a precios de mercado, no regulados.

"Estamos interesados en vender oferta mayorista de todas nuestras infraestructuras, absolutamente todas, pero no queremos precios regulados", dijo Julio Linares en el Foro Sociedad en Red, organizada por la entidad pública Red.es y Europa Press.

El consejero delegado de esta multinacional afirmó que hay una creencia generalizada de que los operadores dominantes "van a invertir sí o sí" en las nuevas redes, pero dependerá siempre de la demanda y de la rentabilidad de la inversión, por lo que se trata de "invertir más o menos".

Julio Linares dijo que el Gobierno español está teniendo una actitud hacia la inversión mucho más favorable que la de la Unión Europea en su conjunto y señaló la necesidad que tiene Europa de invertir 400.000 millones de euros en la transformación de las telecomunicaciones.

Al ritmo actual, y teniendo en cuenta que una parte de la inversión va a mantenimiento, se tardarían 20 años en transformar las redes y esto es "un riesgo que Europa no se puede permitir".

La crisis económica unida a las incertidumbres del marco de regulación pueden "llevar a disminuir inexorablemente las inversiones", añadió.

Para Linares las exigencias en banda ancha de los consumidores, que se han convertido en los mayores creadores de contenidos, exigen nuevas redes ya que en 2020 "la totalidad de los contenidos será digital".

Puso como ejemplo que un pequeño vídeo de YouTube consume una capacidad de red equivalente a tres llamadas pero que, en un futuro, uno de alta definición consumirá lo mismo que 230 llamadas.

Resaltó la importancia de este sector para Europa, ya que cada euro que se invierte en telecomunicaciones, supone tres euros para el PIB europeo por lo que se arriesga este crecimiento, la creación de 1.800.000 puestos de trabajo, el crecimiento de la productividad entre un 5 y un 10 por ciento y la I+D.

El directivo de Telefónica criticó a la Unión Europea que empezó a negociar la regulación de 2010 en 2006, por lo que en la actualidad la situación es muy distinta y dijo que lo está haciendo con una óptica que "mira más al pasado que al futuro".

Europa, dijo, debe tener cuatro prioridades: fomentar la competitividad mediante la innovación, la inversión y el empleo; crear nuevos modelos productivos basados en las tecnologías que sustituyan los agotados; promocionar la competencia y apoyar las nuevas tecnologías para hacer una sociedad más sostenible.

Para ello es necesario un esfuerzo público para combatir la brecha digital; privado, con innovación e inversión, y conjunto.

Respecto a la competencia, criticó que la mitad de las operadoras de telecomunicaciones europeas estén todavía participadas por Gobiernos, después de diez años desde el inicio de la liberalización de las telecomunicaciones.

Ante un auditorio en el que se encontraba el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros; el director general de red.es, Sebastián Muriel; el presidente de Telefónica, Cesar Alierta, y directivos de las principales compañías del sector tecnológico, Julio Linares comenzó hablando de la crisis y su repercusión en el sector.