Georgia y un nuevo pacto de seguridad centran la reunión ministerial de la OSCE

Helsinki.-  La situación en Georgia tras la guerra contra Rusia de agosto pasado y un nuevo pacto sobre seguridad que haga frente a los desafíos del siglo XXI serán los asuntos más importantes de la reunión ministerial de la OSCE, que se celebra a partir de mañana en Helsinki.

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(EFE)

La ministra de Exteriores de Georgia, Eka Tkeshelashviliis (i), conversa con el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, durante la reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN mantenida en la sede de la organización en Bruselas (Bélgica), el 3 de diciembre de 2008.

El encuentro de dos días contará, por primera vez en su historia, con la presencia de 50 ministros, según explicó hoy ante la prensa el ministro finlandés de Exteriores, Alexander Stubb, actual presidente de turno de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

Finalmente, la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, no acudirá a la conferencia como se esperaba, debido a su visita a la India tras los sangrientos ataques de Bombay.

Sí han confirmado su presencia el ministro de Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, el alemán Frank-Walter Steinmeier, el británico David Miliband, el francés Bernard Kouchner y el español Miguel Ángel Moratinos, entre otros.

La OSCE, con sede en Viena y que agrupa a 56 países de América del Norte, Europa y Asia Central, trata de prevenir conflictos y defender el respeto de los derechos humanos y la democracia en sus países miembros, con especial atención a los países ex comunistas.

Esto ha hecho que las tensiones de OSCE con Rusia hayan aumentado en los últimos años, ya que Moscú ha venido repitiendo que la organización no es neutral y la tacha de un instrumento de los países occidentales para aumentar su influencia en la zona.

La OSCE falló este verano en unos de sus objetivos declarados -evitar conflictos bélicos- cuando Georgia y Rusia se enfrentaron por las regiones separatistas de Osetia del Sur y Abjasia.

Stubb criticó en su momento a Moscú diciendo que había "violado los principios fundamentales" del organismo y condenó su decisión de reconocer la independencia de las regiones separatistas.

El principal objetivo de la presidencia finlandesa será conseguir una declaración final a la conclusión del encuentro, algo que se logró por última vez en 2002, según explicó Tiina Nikkinen, portavoz de la presidencia.

"No sabemos cómo va a salir la reunión, es difícil, pero lo intentaremos", agregó en declaraciones a Efe, sin ocultar su pesimismo.

Las decisiones en la OSCE se toman por unanimidad y el conflicto entre Georgia y Rusia hará más complicado aún lograr una declaración conjunta de todos los miembros.

Bloqueado ha quedado también el regreso de observadores de la organización a las regiones secesionistas de Georgia, con un cruce de recriminaciones entre la OSCE y Moscú por entorpecer el proceso.

Los ministros discutirán también una propuesta franco-rusa para una cumbre que discuta un nuevo pacto de seguridad en Europa bajo los auspicios de la OSCE y que podría celebrarse en Viena a mediados del año 2009.

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y su homólogo ruso, Dmitri Medvedev, propusieron recientemente que se celebre esa cumbre para estudiar y crear un nuevo orden de seguridad alejado de la Guerra Fría.

Se prevé que Lavrov presente mañana detalles del plan ruso para ese pacto que sustituya los tratados de armas convencionales, heredados de la Guerra Fría y que Moscú considera "desfasados".

Detrás del malestar de Rusia se encuentra el despliegue del escudo antimisiles de EEUU en Polonia y República Checa, países del antiguo Pacto de Varsovia ahora integrados en la OTAN y en la Unión Europea.

Otro asunto sobre el que podría haber algún avance es el conflicto del enclave de Nagorno-Karabaj, que enfrenta a Armenia y Azerbaiyán, después de un reciente encuentro entre los presidentes de ambos países en Moscú.

En ese sentido, Stubb anunció hoy que espera la aprobación de una declaración sobre ese conflicto, y tal vez también un texto sobre el "conflicto congelado" entre Moldavia y la región secesionista de Transnistria.