Cospedal pide al Gobierno la reforma del Código Penal para suprimir los atenuantes a los agresores

Guadalajara.-  La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha pedido al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, la reforma del Código Penal para que en los casos de violencia machista el agresor no vea atenuada la pena por drogadicción o alcoholismo.

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(EFE)

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.

Durante un acto celebrado en Guadalajara en con motivo de la celebración hoy del Día Internacional contra la Violencia de Género, la también presidenta del PP en Castilla-La Mancha afirmó que "no puede ser, como está ocurriendo ahora, que todavía se considere como un atenuante de la responsabilidad del agresor la drogadicción o el alcoholismo".

De Cospedal planteó públicamente al Gobierno siete medidas para combatir las situaciones de malos tratos a las mujeres durante una jornada contra la Violencia de Género convocada por la Asociación de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer) en la capital alcarreña.

Para la secretaria general del PP también es fundamental la reforma de la actual legislación para los agresores que han quebrantado las órdenes de alejamiento y protección con el fin de que sean puesto a disposición judicial de forma "inmediata" y "basta de paños calientes".

Además de las reformas legales, exigió un "plan firme, exigente y decidido" para procurar empleo a las mujeres maltratadas, porque, "sólo siendo libres se puede salir del círculo de la violencia".

Demandó que todo lo que llevan prometiendo desde hace años el Gobierno sea una realidad porque "no está abordando este problema con la eficacia y la celeridad que es preciso" cuando tiene "la responsabilidad de actuar con firmeza" para garantizar a las mujeres que denuncian a sus agresores que van a tener toda la protección por parte de la sociedad.

Según dijo, cuatro años después de las medidas puestas en marcha por el Gobierno, el número de víctimas sigue creciendo y aunque las denuncias han aumentado -dijo- las mujeres siguen sin tener hoy la garantía de que por denunciar no se van a ver más expuestas.

También pidió planes especiales para las mujeres que se encuentren en una situación de especial vulnerabilidad, como las que sufren una situación económica precaria, las discapacitadas y las inmigrantes, así como más juzgados contra la Violencia de Género con medios personales y materiales y más efectivos policiales para proteger a las víctimas de los malos tratos.

Como última medida, pero, no por eso menos importante -dijo- pidió también al Gobierno que sea consciente de la necesidad de concienciar a la sociedad de que la prevención y la educación de los hijos e hijas es fundamental para evitar en el futuro la violencia doméstica y destacó el papel "preponderante" que todavía tiene la mujer en esa educación.

"Un niño educado en unos valores equivocados acabará siendo un adulto que también tenga valores equivocados y podrá ejercer en el futuro la violencia o padecerla creyendo que se lo tiene merecido", precisó.

No quiso dejar pasar por alto en su intervención su recuerdo al profesor Jesús Neira, hospitalizado por defender a una mujer que estaba siendo agredida por su pareja o a las personas más vulnerables como los niños de los hogares donde hay violencia de género.

"Todos tenemos que responsabilizarnos personalmente de que cuando conozcamos casos de violencia de género, de mujeres, niños, ancianos o de hombres, debemos de ayudarles a denunciar y que pierdan el miedo", agregó la dirigente del PP.

En este sentido, aludió al compromiso de su partido "de que las mujeres víctimas de esta violencia se encuentren atendidas, sean oídas y tengan la seguridad de que si denuncian no van a ser más vulnerables".

De Cospedal hizo también hincapié en que la violencia de género es mayor en el ámbito rural porque las mujeres tienen menos posibilidades de denunciar y se sienten más desprotegidas.

También recordó a las sesenta víctimas de este año y en especial, el caso de Silvina de Alovera o el "especialmente dramático" de la mujer embarazada de Argamasilla de Alba (Ciudad Real) que fue asesinada en 2006 junto a su sobrina por su ex-pareja, que ha sido condenado hace unos días a 47 años de cárcel, aunque le parecen "pocos años".

Para Cospedal, "esto no es una estadística, son vidas rotas, truncadas, familias destrozadas, y fundamentalmente, la vida de unos menores marcada para siempre por lo que vivieron en su casa", puntualizó.