El transexual que dio a luz a una niña en junio está embarazado de nuevo

Washington.-  El transexual estadounidense Thomas Beatie, que saltó a la fama por ser el primer "hombre embarazado" del mundo y que dio a luz a una niña el pasado mes de junio, anunció hoy que espera otro bebé.

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(EFE)

Beatie decidió cambiarse de sexo a los 24 años, se sometió a una operación para quitarse los pechos y legalmente cambió su género de femenino a masculino.

Beatie, de 34 años, y su esposa Nancy, de 46, dieron a conocer la noticia en una entrevista concedida al canal ABC, que se emitirá esta noche en horario de máximo audiencia.

Según ha adelantado ABC, Beatie decidió no volver a tomar sus hormonas masculinas después de dar a luz a la pequeña Susan, que ahora tiene cuatro meses, para poder tener otro hijo.

En la entrevista, el transexual asegura que se siente bien y habla por primera vez del parto de Susan, que fue por vía natural tras 40 horas y en el que los médicos permitieron a su esposa Nancy cortar el cordón umbilical del bebé.

Nacido mujer y criado en Hawai, donde su madre se suicidó cuando él tenía 12 años, Beatie decidió cambiarse de sexo a los 24 años, se sometió a una operación para quitarse los pechos y legalmente cambió su género de femenino a masculino.

Comenzó a seguir un tratamiento hormonal para aumentar sus niveles de testosterona, pero resolvió mantener sus órganos sexuales femeninos a pesar de hacer vida como un hombre.

Su aparición la primavera pasada en la revista gay "The Advocate", con su aspecto varonil, barba y el torso desnudo mostrando su tripa de embarazado, desató la polémica en la sociedad estadounidense y el caso traspasó las fronteras de ese país.

"Me quedé muy sorprendido cuando vi que se había hecho eco del caso todo el mundo en menos de 24 horas", cuenta Beatie, quien asegura que se vio en páginas de internet de China, Rumanía, Rusia y Brasil.

No obstante, más allá de lo curioso de la situación también hubo quien cuestionó el caso y se desató una avalancha de críticas que continúan hasta hoy.

Los Beatie explican que todavía siguen recibiendo amenazas de muerte, cartas con comentarios ofensivos e insultos por internet, pero no quieren mudarse del tranquilo pueblo de Bend en el estado de Oregón, donde residen.

Pese a la preocupación de sus familias, Beatie asegura que no tienen miedo y que quieren conservar su vida allí, ya que sienten que son una familia tradicional.

"Somos un hombre, una mujer y un niño. Es irónico lo diferentes que éramos, pero ahora somos sólo una familia como cualquier otra", asegura.