El consejero valenciano dice que la reforma sólo se aprobará, si no pide el fin del trasvase

Alicante.-  El conseller de Medio Ambiente, José Ramón García Antón, ha acusado hoy al Gobierno de "tener una política de palabras y no de hechos en materia hídrica", y se ha mostrado convencido de que la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha sólo se aprobará si no pide la caducidad del Tajo-Segura.

El conseller ha hechos estas declaraciones tras poner la primera piedra de las obras de la margen derecha del pos-trasvase Júcar-Vinalopó, en el municipio alicantino de Villena, que cuentan con un presupuesto cercano a los 30 millones de euros, con los que se realizará un canal de 25 kilómetros que se usarán en 20.000 hectáreas para riego agrícola.

García Antón se ha mostrado totalmente convencido de que la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha no pedirá la caducidad del trasvase Tajo-Segura y que esta circunstancia será imprescindible para su aprobación.

A este respecto, García Antón ha argumentado que, "gracias al trasvase Tajo-Segura, una parte importante de la provincia de Alicante y otra de Murcia tienen la posibilidad de beber y regar", algo que "no puede quitarse de ninguna manera".

El conseller ha opinado que sería "inconstitucional" la caducidad de ese trasvase, ya que "el Tajo pasa por muchas comunidades autónomas y no hay ninguna que pueda hipotecar el futuro del Tajo", pues "depende del Estado español".

Por consiguiente, "lo que deben hacer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, es garantizar" ese trasvase para que "los alicantinos y los murcianos tengan todas las posibilidades, al igual que en el resto de España, de poder beber y regar", ha señalado.

Además, García Antón ha considerado que "en los últimos tiempos se está demostrando" que la política del Ministerio de Medio Ambiente en materia hídrica "es sólo una política de palabras y no de hechos", y ha expuesto que, "dentro del propio Departamento, hay quienes afirman una cosa y otros que dicen todo lo contrario".

"Mientras hablamos con los altos cargos del Ministerio para firmar un pacto del agua que incluya todos los complementos posibles, desde los trasvases, la desalación o la mejor utilización hídrica, hay otra gente dentro del Ministerio a la que eso no le interesa y que conserva la mentalidad de la anterior responsable de Medio Ambiente", ha manifestado.

Por eso "empezamos a dudar de las buenas intenciones de este Departamento y si, en realidad, piensan llevar a cabo actuaciones o lo único que pretenden es dividir a los propios usuarios del Vinalopó", ha añadido.

Según el conseller, "la única que ha mantenido una postura clara y coherente en materia hídrica es la Generalitat, ya que siempre ha apostado por el trasvase Júcar-Vinalopó, pero sostenible y con calidad suficiente para poder utilizarlo aquí".