Serbia despliega una gran operación para buscar a Mladic en el suroeste del país

BELGRADO.-  Unidades especiales de la policía y gendarmería de Serbia iniciaron hoy una amplia operación de búsqueda del presunto criminal de guerra prófugo Ratko Mladic en la zona de Valjevo, a unos 90 kilómetros al suroeste de Belgrado, aseguró la emisora de radio y televisión B92.

(EFE)

Según la emisora, que cita fuentes del Ministerio del Interior, también se investiga a supuestos miembros de una red de apoyo logístico y financiero al prófugo ex líder militar serbobosnio. La operación de búsqueda se efectúa por orden de la Fiscalía especial serbia de crímenes de guerra.

El denominado "equipo de acción" gubernamental para la búsqueda de los prófugos acusados de crímenes de guerra confirmó que la operación de Valjevo es "parte de una acción global" para localizar y capturar a Mladic y también a Goran Hadzic, un ex líder de los serbios de Croacia. Ambos son los únicos dos acusados que todavía se esconden de la Justicia internacional.

La agencia de noticias "Fonet" asegura que unidades especiales de la policía registran las instalaciones de la fábrica de ventanas "Vujic", en las afueras de Valjevo. Los medios indican que unos 50 miembros de la gendarmería llegaron en vehículos oficiales a la fábrica para su registro, aunque los trabajadores pudieron continuar su trabajo.

Varios gendarmes registraron también las casas de los hermanos Vidoje y Vlajko Vujic, situadas en las inmediaciones de la planta que ostenta el nombre de esa familia. Miembros de la familia aseguraron que el registro fue detallado "desde el suelo hasta el techo, miraron todos los papeles, incluidos las fotografías familiares".

Antes se consideraba que los hermanos Vujic mantenían relaciones con la cúpula política y militar serbobosnia, entre ellos Mladic, y que también los visitaba con frecuencia Luka Karadzic, el hermano del acusado ex presidente de los serbios de Bosnia, Radovan Karadzic, arrestado en julio pasado cerca de Belgrado.

Mladic es inculpado por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) de genocidio en relación con la matanza de Srebrenica y de otros crímenes cometidos durante la guerra bosnia (1992-1995). Su captura y extradición es la condición clave para que Serbia pueda proseguir sin obstáculo su acercamiento a la Unión Europea, tras la firma del acuerdo de asociación en abril pasado.