Aído advierte que la conciliación implica un cambio de mentalidad en las empresas y la sociedad

Granada.-  La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, ha advertido hoy de que avanzar en la conciliación de la vida familiar y laboral de hombres y mujeres implica un "cambio de mentalidad" de las empresas y de la sociedad civil en su conjunto, que no obstante ya están dando muestras de ello.

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(EFE)

La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, asistió hoy a la clausura de las XII Jornadas "Conciliación de la vida personal, familiar y laboral: una visión integral desde el ámbito local", organizadas por el Ayuntamiento de Maracena (Granada).

Aído ha hecho estas declaraciones durante la clausura en Maracena de las Jornadas de "Conciliación de la vida personal, familiar y laboral: Una visión integral desde el ámbito local", promovidas por el ayuntamiento de la localidad granadina.

La implantación de la conciliación, "imprescindible" en la consecución de una "igualdad real efectiva", es un objetivo a compartir por la administración y las empresas, a quienes corresponde propiciar un sistema de organización en el trabajo que permita compatibilizarlo con la vida familiar y fomentar la "corresponsabilidad" entre hombres y mujeres, según Aído.

Para la ministra, lograr esta igualdad real efectiva implica un "cambio de mentalidad" de las administraciones, las empresas y la sociedad civil en su conjunto.

No obstante, ha preciado que cada vez son más las empresas, tanto grandes como pequeñas, que incluyen planes de igualdad -en el caso de las pymes, más del 90 por ciento, según la ministra-.

Aído ha sostenido que fomentar la igualdad en el ámbito laboral se traduce además en una mayor eficiencia y rendimiento empresarial, por lo que ha considerado "un despilfarro prescindir del talento y la capacidad de la mitad de la población -las mujeres-".

Aunque el 83 por ciento de los cuidadores siguen siendo mujeres, ha dicho que hay "elementos para la esperanza" como el hecho de que el 80 por ciento de los padres se hayan acogido a los permisos de paternidad, una de las medidas incluidas en la ley de Igualdad.

Esa ley supuso un "primer paso" en un cambio de planteamiento: el de que "la conciliación es un derecho de hombres y mujeres y no sólo de las mujeres", y permitió "superar el término de conciliación" para sustituirlo por el de "corresponsabilidad", ha indicado.

"Tenemos la hoja de ruta perfectamente diseñada. Hemos trazado el camino y ahora nos toca recorrerlo", ha agregado Aído, quien ha precisado que para ello es necesario voluntad política, coordinación y compromiso de la sociedad civil en su conjunto.

Según la ministra, las prioridades del Gobierno pasan, entre otras, por el desarrollo de la ley de Igualdad, el fomento de ayudas a las empresas para la implantación de planes de igualdad y la consolidación del Plan Educa, para el que recientemente se aprobó una inversión de 1.087 millones de euros entre 2008 y 2012 dirigidos a la creación de 300.000 plazas de guardería.

En la clausura de las jornadas también ha participado la consejera andaluza de Igualdad, Micaela Navarro, quien ha subrayado el papel de las más de 1.700 asociaciones de mujeres de Andalucía en el fomento de la "pedagogía" necesaria para desarrollar la ley de Igualdad.

Aunque ha reconocido que ésta incluye medidas que ya existían, ha dicho que la diferencia es que ya están reconocidas por ley.