El comisario europeo de desarrollo vuelve a Cuba en otro paso hacia la normalización de las relaciones

La Habana.-  El comisario europeo de Desarrollo, el belga Louis Michel, llegará mañana a Cuba en su segunda visita de este año para restablecer la cooperación de la Unión Europea (UE) con la isla y dar un nuevo paso en el largo camino hacia la normalización de las relaciones entre las dos partes.

El representante de la Comisión Europea (CE) en Cuba, Javier Niño, explicó hoy a Efe que la visita tiene dos propósitos: "poder cooperar aquí en un momento importante con un país que ofrece un potencial en este campo muy significativo" y "contribuir al proceso de normalización de las relaciones".

El ambiente en que se desarrollará este nuevo viaje de Michel a la isla será muy diferente al que rodeó su anterior visita, en marzo.

Entonces, el Gobierno cubano le expresó a Michel que para poder abrir un diálogo formal entre ambas partes resultaba "indispensable" la eliminación de las sanciones diplomáticas contra la isla aprobadas en 2003, tras la condena en juicios sumarísimos de 75 disidentes, y suspendidas en 2005.

El comisario llega ahora para dar un nuevo paso en el proceso de normalización de las relaciones con las sanciones eliminadas en junio y el diálogo político en marcha tras la primera reunión ministerial desde 2003 entre Cuba y la UE, celebrada en París la semana pasada.

En palabras del embajador cubano en Bruselas, Elio Rodríguez Perdomo, Michel será recibido en La Habana "como un amigo".

Michel tiene intención de formalizar la reanudación, tras cinco años, de la cooperación europea en Cuba y poner fin así a "una situación anómala" en este terreno, en palabras de Niño.

Aunque el programa de la visita aún no está cerrado, Michel se reunirá con el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, y probablemente con el vicepresidente Carlos Lage.

No se ha informado de si el comisario se entrevistará con el presidente, Raúl Castro, algo que no se produjo en el anterior viaje.

Tampoco parece previsible que se produzca un encuentro con miembros de la disidencia interna, con los que no se reunió en marzo.

Fuentes de la UE consultadas por Efe al respecto indicaron que "no está finalizado el programa".

La cooperación europea tendrá una primera fase de aplicación con ayuda de emergencia para dar respuesta a los desastres dejados por los huracanes que azotaron Cuba hace un mes y medio.

La segunda fase, a partir de 2009, será perfilada durante la visita de una misión técnica de la CE, inicialmente prevista para dentro de tres semanas, en la que se abordarán las fórmulas de colaboración y el perfil de los proyectos.

Aunque los programas de cooperación de la UE disponen potencialmente de más fondos que los de cualquier país del bloque, su diseño se perfila con carácter quinquenal (el actual está establecido para el periodo 2008-2013), por lo que, según fuentes europeas, habría que otorgar gradualmente recursos para financiar los proyectos en Cuba.

Estos programas estarán centrados en medioambiente, cultura, cooperación económica en el sector agrícola, salud, educación y en ciencia y tecnología, entre otros.

Además, existe el interés de la CE de poder poner en práctica "cooperación triangular" con Cuba, de forma que la isla pueda actuar como una suerte de consultor de la UE en cuestiones como la asistencia sanitaria a la hora de diseñar programas en lugares como África, donde tiene experiencia.

Con la reanudación de la cooperación, Cuba y la UE avanzarán en ese proceso de acercamiento en sus relaciones a la espera de que, presumiblemente en el primer semestre del año próximo y con la República Checa como presidente de turno, puedan tener una nueva reunión en el marco del diálogo político.

Quedan, sin embargo, cuestiones que salvar antes de alcanzar una plena normalización de las relaciones entre las partes.

Pérez Roque reclamó la pasada semana en Madrid y reiteró en París la "eliminación definitiva de la posición común de la Unión Europea hacia Cuba", fijada en 1996, como paso indispensable para una normalización y recomposición plena de las relaciones entre ambas partes.