Revilla pedirá hoy en Moncloa un impulso al AVE e inversión contra la crisis

Santander.-  El jefe del Ejecutivo cántabro, Miguel Ángel Revilla, pedirá hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que se agilicen las obras del AVE y del resto de los grandes infraestructuras previstas en Cantabria y le animará a aumentar la inversión pública para luchar contra la crisis.

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(EFE)

El presidente de Cantabria, Miguel Angel Revilla.

Esos son los principales asuntos que Revilla se propone tratar con Rodríguez Zapatero, con quien volverá a reunirse en el Palacio de La Moncloa, un encuentro que, en un principio estaba previsto para el pasado día 14 pero tuvo que ser aplazado.

Según ha adelantado el presidente regional, la conexión de Cantabria con Madrid a través del tren de alta velocidad será su principal reivindicación. El objetivo es concretar y agilizar lo máximo posible los plazos de ejecución de este obra, en la doble conexión con Madrid y con Bilbao, y también de otras grandes infraestructuras comprometidas por el Gobierno central.

Ese es el caso de la Autovía dos Mares, una obra que Revilla considera fundamental y que generaría, ha dicho, empleo "desde Miranda de Ebro a Arenas de Iguña".

El jefe del Ejecutivo cántabro cree que en 2009 podría estar licitada esta carretera, que implicará una inversión de casi mil millones de euros.

Además de hablarle de estas dos grandes infraestructuras, Revilla tiene previsto transmitir a Zapatero la importancia que tiene para la comunidad autónoma la conclusión de la autovía entre Aguilar de Campoo y Burgos, así como el resto de los proyectos incluidos en el Plan Estratégico de Infraestructuras, sin olvidar el futuro centro superior de estudios del español de Comillas.

Otro de los asuntos centrales que se propone plantear en su entrevista con el presidente del Gobierno, cuyo comienzo está previsto para las 11.00 horas, es la necesidad de que se aumente la inversión pública en España para hacer frente a la crisis económica.

Para Revilla, la coyuntura actual no requiere recortes, sino todo lo contrario, una mayor inversión que active la economía y especialmente en aquellos sectores que más están sufriendo la crisis.