SEGOVIA.- Se le conoce por sus impecables perfiles de Sadam Hussein, Fidel Castro o Hugo Chávez para The New Yorker. Steven Soderbergh lo buscó como asesor para su reciente película 'Che, el argentino' porque se le considera una de las mayores autoridades mundiales en la figura del guerrillero revolucionario, sobre quien ha escrito una biografía monumental. Además es autor del libro 'La caída de Bagdad' y ha informado desde las mayores zonas de conflicto del planeta, desde Afganistán a Israel o el Líbano. Ahora prepara un trabajo sobre el Zimbabue de Mugabe. Jon Lee Anderson es un norteamericano errante como una mirada preocupada sobre su propio país, Estados Unidos. Hablamos con él durante su reciente visita a España para asistir al Hay Festival que se celebró en Segovia.
Pregunta.- Estados Unidos se prepara para un cambio histórico en las elecciones del 4 de noviembre próximo...
Respuesta.-Sí. Cualquier cosa es mejor que Bush. Ya desde el año 2000, cualquier cosa hubiera sido mejor que Bush. John McCain no es santo de mi devoción aunque tampoco es un hombre vil. Pero creo que es demasiado mayor y plantea políticas que no dan la talla ante las dificultades del mundo de hoy. Pienso que Obama puede responder mejor a esas dificultades, y no por su color. Tampoco me inspira ningún cariño especial Obama: me parece un tipo un poco frío. Pero al mismo tiempo es un hombre inteligente y capaz. Y eso se nota. Más allá de eso, creo que si Obama llega a jurar como presidente de Estados Unidos, cuando veamos ese momento en las pantallas de televisión, va a ser trascendental. De alguna forma nos entrará en el ADN: que un negro se haya convertido en presidente de Estados Unidos. No podemos predecir las consecuencias pero van a ser trascendentales, transformadoras. Eso tiene que tener un efecto benéfico en EEUU y en todo el mundo porque sería un cambio socialmente crucial, ya que todos tenemos algún grado de racismo. Es un corcho en una botella que tenemos que romper. Y si hubiera sido Hillary, una mujer, el efecto habría sido similar. Asia y América Latina nos llevan décadas de delantera en ese sentido, porque han elegido mujeres, y Europa por supuesto.
P.-Para mujeres Sarah Palin...
R.-Sí, bueno. Yo estuve en Nueva York la semana pasada y la expectativa es que McCain, de hacerse con la presidencia, morirá en el poder y Palin lo reemplazará. Entonces el comentario era: 'bueno, Palin será mejor que Bush'. Y hasta yo mismo lo digo. Palin es transparente y todos sabemos que no es capaz. Pero incluso así es mejor que el hombre que ocupa el Despacho Oval desde hace 8 años. Palin al menos tiene potencial para aprender algo en el cargo...
P.-¿Qué clase de país deja Bush tras de sí?
R.-Sigue siendo el mismo pueblo norteamericano de siempre: un pueblo dinámico, creativo, volátil, innovador; un lugar donde existe la sensación de que se puede lograr cualquier cosa. Por otro lado está la parte más negativa, el lado que me pesa mucho siempre: que Bush deja un pueblo muy dividido, muy polarizado, consciente de su polarización de una forma que no lo fue nunca antes. Yo no considero a quienes apoyan a Bush conciudadanos míos, no tienen nada que ver conmigo. Podrían ser norcoreanos, no comparto filosóficamente nada con ellos. O sea, el mandato Bush nos ha llevado a una brecha social y política muy fuerte. Yo siempre pensaba que había una forma de comunicar con ese otro lado, pero ahora hay una brecha en la sociedad estadounidense que es dura. Y en un país donde hubo una guerra civil muy cruenta, esto es aún más grave. Si la escisión en el pueblo estadounidense empezó a cerrarse a partir de los años sesenta, ahora se ha reabierto y se ha erigido un muro aún más alto.
P.-¿La elección de Obama no profundizaría esa brecha?
R.-Yo creo que no. Obama puede sanear el ambiente. Tiene una oportunidad de incidir en el país y cambiarlo, de transformarlo. Todos sabemos que McCain sería como Bush padre. Su elección no sería algo drámático, pero sería una continuación de la misma historia. Sin embargo, si vence Obama sería como si Robert F Kennedy hubiese ganado en el 68 en lugar de que lo hubiesen asesinado, como si esa historia truncada se reencarnase ahora en él.
P.- Pero gane quien gane, se encontrará en una posición muy complicada, con un país en medio de una gran crisis económica, con sus aventuras en política exterior fracasadas y pasando factura, con el desafío de China, que le quita protagonismo y poder en el escenario internacional.,,
R.-Efectivamente, Bush deja un país con una guerra exterior, aparentemente sin fin; con una deuda externa gigantesca, subvencionada por China, la nueva superpotencia rival y en auge; con una Rusia en reascenso que busca protagonismo de nuevo. Un país, además, endeudado, lleno de autocuestionamientos. Clinton, con sus virtudes y defectos, dejó a Estados Unidos en mucho mejor estado. Cuando uno mira atrás a la época de Clinton, parece como la época dorada. Yo iba por el mundo en aquellos tiempos y, más allá del antiamericanismo de siempre, la aversión a los estadounidenses no era tan visceral como ahora. A la gente le gustaba antes Estados Unidos. Nos odian hoy en día. Somos como los rusos en la peor época. En el escenario actual, yo no querría ser el próximo presidente de Estados Unidos. Si fuera McCain, diría '¿para qué voy a querer meterme en ese lío a los 71 años? ' Lo hace por puro ego. En el caso de Obama, yo me imagino que, aunque es ambicioso, tiene que decirse a sí mismo... pero ¡qué mal momento me ha tocado!' La verdad es que mayores retos nunca ha habido.
P.- ¿En qué dirección querrías ver dirigirse Estados Unidos con la nueva presidencia?
R.-En política exterior, me gustaría un presidente que dialogara con los movimientos opositores ideológicos que están tomando auge en el mundo, que reconociera el papel histórico de Estados Unidos en el mundo y que lo volviera a explicar: un Estados Unidos que vuelve a incidir de buenas maneras en el mundo, que invierte de buenas maneras en su imagen, que deja de ser un país guerrero y tragatodo. ¿Qué paso con ese Estados Unidos de hace 35 años? Me consta que todavía existe, pero ¿por qué no se proyecta? Necesitamos un presidente que vea eso y logre romper el maleficio. Creo que Obama podría hacerlo. McCain no. Pero ese cambio es muy importante para limpiar el ambiente en el mundo. No es bueno que haya tanta tensión, ni para Estados Unidos ni para los demás. Me preocupa que el mundo base sus opiniones en prejuicios descabellados y en percepciones equivocadas y caricaturescas unos de otros. Eso tiene que acabar.
Si quieres firmar tus comentarios, regístrate o inicia sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Es el ejemplo clásico del individuo que vive en su propio universo inmutable e inamovible regido por unos axiomas de manufactura propia +
Anderson no sólo es un gran periodista gracias a su "olfato" y vocación. También ha estudiado Filosofía, Sociología y Ciencias Políticas. +
Soitu.es se despide 22 meses después de iniciar su andadura en la Red. Con tristeza pero con mucha gratitud a todos vosotros.
Fuimos a EEUU a probar su tren. Aquí están las conclusiones. Mal, mal...
Algunos países ven esta práctica más cerca del soborno.
A la 'excelencia general' entre los medios grandes en lengua no inglesa.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Citar este verso de Machado no puede ser más ocurrente al hablar de Mariano Rajoy. Tras la renuncia de Zapatero y las voces que señalan que la estrategia popular podría verse dañada, es necesario preguntarse algo. ¿Ha hecho camino Rajoy? ¿Se ha preparado para ser presidente? Quizás la respuesta sorprenda.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Algunos luchamos por tener los pies en suelo.” Lo decía ayer en su Twitter Raül Romeva, uno de los cuatro eurodiputados españoles (Oriol Junqueras, de ERC, Ramon Tremosa, de CiU, Rosa Estarás del PP y él, de ICV) que apoyaron la enmienda para evitar que el presupuesto comunitario de 2012 contemple los vuelos en primera clase de los parlamentarios europeos. No era una excepción. Lo escribía ahí porque es lo que hace siempre: ser transparente.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Son los cien primeros, como podrían ser doscientos o diez. Lo importante es el concepto. La idea de tener unos días para llevar a cabo la transición desde la oposición al gobierno. Del banquillo, a llevar el dorsal titular. Nunca tendremos una segunda oportunidad de crear una buena primera impresión. Y los cien primeros días son esa primera impresión. Veamos su importancia.
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
“Os propongo que sea el Comité Federal, en la próxima reunión que tengamos, después de las elecciones autonómicas y municipales, el que fije el momento de activar el proceso de primarias previsto en los Estatutos del partido para elegir nuestra candidatura a las próximas elecciones generales.” De esta manera, Zapatero ha puesto las primarias en el punto de mira tras anunciar que no será candidato a la reelección. Tras este anuncio, observamos algunas reflexiones sobre el proceso
En: E-Campany@
Recomendación: Albert Medrán
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si quieres, puedes registrarte o, si ya lo estás, iniciar sesión ahora.