El bus del futuro

Un vehículo articulado con más plazas, un diseño atractivo y confortable, e incluso una cabina sin conductor. Así puede ser el autobús al que te subas dentro de unos años. Un proyecto europeo busca reinventar el bus.

Peter Kukorelli

¡Bienvenidos a bordo! anuncia este autobús

El nombre del proyecto lanzado desde la Asociación Internacional de Transporte Público (UITP) es bastante esclarecedor: 'Sistema de Autobuses Europeos del Futuro' ('European Bus System of the Future' en inglés). En sí, se trata de un proyecto que busca evaluar nuevas medidas para mejorar la movilidad con este medio de transporte en siete ciudades europeas, entre ellas, Madrid. Y con esta misma idea, diseñadores repintan cómo debería ser autobús del futuro (ver álbum).

A pesar de que la edad media de los autobuses europeos es de 7,6 años (según datos de la UE), los diferentes constructores implicados en el proyecto (Evobus/Mercedes, Irisbus Iveco, MAN, Scania, Volvo...) buscan una nueva generación de autobuses urbanos que haga más atractivo el servicio y que estimule a las ciudades europeas a mejorar sus servicios existentes.

Con un presupuesto de 26 millones de euros, "el objetivo del proyecto es mejorar la imagen del sistema de autobuses en áreas urbanas a través de las nuevas tecnologías, tanto en vehículos como en infraestructuras y en paralelo también mejorar la explotación del servicio", explica Rocío Cascajo Jiménez, investigadora del Centro de Investigación del Transporte (TRANSyT) y una de las encargadas de evaluar el proyecto en nuestro país. Esta experta hace hincapié en que no sólo se pretende mejorar los servicios en zonas urbanas sino también en las suburbanas, sobre todo en los accesos de las ciudades.

Con todo, el proyecto intentará mejorar el tránsito circulatorio urbano con la implantación de diversas medidas: además de la incorporación de autobuses de atractivo diseño, se prevé que los nuevos vehículos sean articulados y llegar a tener una capacidad de hasta 210 pasajeros. El nuevo autobús tendría más puertas para facilitar la subida y bajada de viajeros, cada una de las cuales contaría con su correspondiente lector de billetes, y sus asientos serían de mejor calidad de los que estamos acostumbrados. Además, se sigue investigando en los combustibles más limpios, ya que sólo el 10% de la flota europea funciona con gas natural comprimido (CNG), gas licuado de petróleo (LPG), biodiésel (en España sólo se utiliza un 6% de este biocombustible), biogás o electricidad, según un estudio reciente de la UE (ver pdf).

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Eric Daru y Nicolas Groult

Detalle del diseño de bus que obtuvo el primer premio del concurso

Como detalla Cascajo una de las medidas más novedosas que podríamos encontrar en todos los autobuses del futuro es el guiado óptico sobre plataforma reservada. Este sistema consiste en una cámara situada en el frontal del vehículo que lee las marcas pintadas de la calzada que determinan la mejor trayectoria del servicio. Un microprocesador recoge los datos y permite fijar el recorrido a seguir automáticamente, incluso puede corregir la trayectoria ante cualquier desviación. Todo ello funciona con un motor eléctrico situado en la columna de dirección. "El bus del futuro puede que no necesite ni conductor", opina Cascajo, "de hecho, este sistema se está probando ya en algunas ciudades españolas como Castellón", añade.

Por otra parte, los pasajeros podrán acceder a una información en tiempo real sobre la ruta y las incidencias que puedan surgir mientras viajan y las plataformas de acceso estarán habilitadas para personas discapacitadas. La posibilidad de llevar bicis también se contempla en esta iniciativa europea. Otras innovaciones que podrían incluir los nuevos diseños se encaminarán a mejorar la comodidad (por ejemplo, favoreciendo el tránsito en el interior del vehículo, utilizando billetes que no necesiten el contacto), la seguridad y la visibilidad del viajero (mayor iluminación y grandes ventanales para observar el exterior entre otras).

Cascajo está segura de que España tiene una oferta de transporte público muy interesante en las grandes urbes, pero lamenta que "el problema de la movilidad aparece en las pequeñas ciudades cuando la frecuencia de los autobuses es muy baja y la gente opta por coger el coche en vez de quedarse esperando en la parada".

¿Sueles montar en los autobuses de línea? ¿Qué innovaciones incluirías tú para el rediseño del autocar del futuro?

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