Miles de personas colapsan el Santuario en el día de la patrona

Ampuero.-  Miles de personas procedentes de toda Cantabria y de las provincias limítrofes han ocupado hoy todos los rincones del Santuario de la Bien Aparecida, en Hoz de Marrón (Ampuero), para venerar a la Patrona de Cantabria.

La celebración, que ha tenido como acto central una misa en la explanada del templo oficiado por el obispo de Santander, Vicente Jiménez, ha estado presidida por un día luminoso que ha favorecido que se incrementara el número de asistentes con respecto a años anteriores, lo que ha colapsado el tráfico en los accesos.

En este 2008, que coincide con el centenario de la presencia de la Orden Trinitaria en el Santuario para custodiar a la Virgen, las colas de vehículos que pretendían subir al recinto han sido más largas de lo normal, hasta el punto de que sobre las 11.30 horas, poco antes de la misa mayor, el tráfico estaba colapsado desde el propio Santuario hasta el centro de Ampuero.

Los propietarios de las fincas situadas en la carretera han hecho su particular agosto con las plazas de aparcamiento, a un precio de tres euros.

Un amplio dispositivo de seguridad de la Guardia Civil que abarcaba tanto tierra como aire, mediante un helicóptero, ha procurado ordenar el tráfico y mantener la fluidez del paso de vehículos.

Como todos los años, el acceso al Santuario se ha realizado hasta las 15.00 horas por Ampuero, pero la salida, hasta esa hora también, se ha procurado por Padiérniga o Bádames; ya por la tarde se ha invertido el orden para dar una mayor seguridad y capacidad de desalojo.

Han participado en el operativo efectivos de Protección Civil, de la Agrupación de Colindres, junto a efectivos de este cuerpo de Santander, Ramales, Camargo o Castro Urdiales, entre otros.

La campa inferior del Santuario ha sido la base de operaciones de este dispositivo y del sistema sanitario y de enfermería del Gobierno de Cantabria, que ha instalado un hospital de campaña en el lugar.

Pese a que ya desde la noche anterior, cuando se realizan ofrendas florales a la Virgen, ha habido una asistencia masiva de fieles, el acto central de la jornada de hoy, la Misa Mayor del medio día, ha tenido una mayor presencia de personas, según ha señalado el Superior de la Orden Trinitaria que custodia a la Virgen en el Santuario, Antonio Arteche.

Arteche ha dicho que "nunca hasta ahora se habían agotado las velas que se proporcionan a los fieles para participar en la Procesión de las Artorchas" que se celebra la noche anterior al día de la Patrona para alcanzar la ermita de San Marcos desde el Santuario.

Las aglomeraciones de personas no han estado sólo en la campa principal del Santuario, donde se ha celebrado la misa mayor, sino también en los bosques próximos, donde la gente ha ido a protegerse del sol, a practicar comidas campestres, y, especialmente, en el lugar en el que se ha instalado el tradicional mercadillo de La Aparecida, donde se han congregado miles de personas.

Pese a que muchos han alcanzaron el Santuario en coche particular o en autobús, también ha habido muchos peregrinos que lo han hecho a pie.

El obispo de Santander y Valle de Mena, Vicente Jiménez Zamora, ha presidido la misa mayor por segundo año consecutivo, desde que el año pasado fuera designado Obispo de la Diócesis.

Tras la misa, ha presenciado la ofrenda de bailes que ha realizado el Grupo de Danzas y picayos Nuestra Señora de Covadonga, de Torrelavega.

Antes de la misa, la imagen de la Virgen ha realizado una breve procesión alrededor de la campa del Santuario transportada por hombres de la Peña Los Que Faltaban, de Hoz de Marrón.

En el acto central de la jornada ha habido una presencia masiva de autoridades políticas de la región.

Han asistido el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; la vicepresidenta, Lola Gorostiaga, así como los consejeros de Obras, José María Mazón, y de Educación, Rosa Eva Díaz Tezanos.

También han acudido senadores, alcaldes de la zona, concejales de los pueblos de los alrededores y el presidente del Parlamento de Cantabria, Miguel Ángel Palacio, además de altas autoridades militares y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Revilla ha destacado que, pese al cansancio que le ha supuesto llegar directamente desde la clausura de la Expo de Zaragoza, no podía faltar a esta cita, donde se ha podido comprobar la devoción a la Virgen por los cientos de peregrinos que han llegado andando de todos los puntos de Cantabria y hasta del Valle de Mena".

El presidente de Cantabria ha dicho que se trata de una de las fiestas "más bonitas de la región, junto con la subida de San Cipriano", que se celebra mañana.

Revilla se ha referido también a las tres nuevas campanas que se estrenaban hoy en la espadaña del Santuario y que ha pagado el Gobierno de Cantabria.

Las campanas han sido construidas en Gajano por los Hermanos Portilla, ha explicado el presidente, quien ha indicado que la mayor parte de las catedrales de España llevan campanas hechas en Cantabria y marcas de los canteros de la región.

Y ha recordado que la primera campana que se puso en América, en un pueblo a cien kilómetros de Méjico, "la llevó Hernán Cortés y está hecha en Meruelo" y que, con motivo de su boda, el Gobierno de Cantabria regaló a los príncipes de Asturias una campana, el "único regalo que está en la puerta de su casa".

La vicepresidenta de Cantabria ha destacado por su parte que la jornada de hoy supone "una despedida del verano y una jornada de convivencia entre todos los cántabros y aquellos que no lo son, tanto creyentes como no creyentes