Los jueces de la CSJ no se someterán a un sorteo por su permanencia si gana el "sí" en el referendo

Quito.-  Los jueces de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Ecuador anunciaron hoy que no se someterán al sorteo para designar a 21 magistrados de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), en la que se transformará si gana el "sí" en el referendo constitucional del próximo 28 de septiembre.

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(EFE)

El ex presidente de la Asamblea Constituyente Fernando Cordero (c), entregó en Quito (Ecuador), al integrante de la comisión de observadores de la OEA Enrique Correa (i), información del trabajo desempeñado como titular de la Asamblea Constituyente.

En un comunicado, la CSJ advierte de que el Régimen de Transición que se abriría si vence el proyecto de nueva Constitución, que se votará en el referendo, establece que el número de jueces que integrarán la CNJ sería de 21, diez menos que los que forman la actual Corte Suprema.

Asimismo, ese régimen señala que, mediante un concurso, se elegirían, de entre los 31 magistrados actuales, a los 21, lo que es "incomprensible" para los actuales jueces supremos.

Además, el texto de la CSJ asegura que si se aprueba el proyecto se simplificarán los requisitos para elegir a los miembros de la CNJ, "lo cual resulta inconveniente".

Entre otras críticas de la CSJ al proyecto constitucional, impulsado por el Gobierno del presidente Rafael Correa, señala que ese Régimen de Transición es "discriminatorio" y que podría acarrear "graves e impredecibles consecuencias en lo nacional e internacional".

"Ante la eventualidad de que se apruebe el proyecto de nueva Constitución, manifestamos categórica y expresamente que no asumiremos ningún cargo en calidad de jueces en la Corte Nacional de Justicia, para la que no concursamos ni fuimos elegidos", asegura el texto de la CSJ, suscrito por su presidente, Roberto Gómez.

De su lado, el sector oficialista ha criticado la posición de la Corte Suprema y ha ratificado que los cambios que se han introducido en el proyecto constitucional buscan transformar la justicia, salpicada en el pasado con denuncias de politización y corrupción.

Además, el movimiento oficialista Alianza País, ha acusado a los jueces de la CSJ de oponerse a los cambios y de promover el "no" en el referendo.

También la Iglesia Católica ha expresado fuertes críticas al proyecto constitucional, por considerar que, supuestamente, abre la posibilidad del aborto y deja abierta la opción a que se integren familias homosexuales, apreciaciones que han sido descartadas por el oficialismo.

Justamente, la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) ha convocado el próximo domingo a misas campales en las ciudades, sobre todo en Quito y en Guayaquil, las dos más pobladas del país, para promover entre los fieles su posición.