La fuerte competencia puede reducir hasta un 50% el beneficio de la banca en 10 años

Madrid.-  La fuerte competencia y la consiguiente caída de los precios puede reducir hasta en un 50 por ciento el beneficio neto de la banca minorista en España en diez años, según se destaca en el estudio "World Retail Banking Report 2008".

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(EFE)

En la imagen, una oficina bancaria ofrece un producto financiero para las hipotecas.

El informe, elaborado por la consultora Cap Gemini, ING y la Asociación Europea de Dirección y Marketing Financiero (EFMA), recoge datos de 26 países y 194 entidades, de las que 18 son españolas -9 cajas de ahorro y 9 bancos-.

Según el estudio, la fuerte competencia futura será consecuencia de los cambios estructurales por lo que deberá pasar la banca internacional en los próximos años, entre los que destacan las regulaciones más estrictas, tecnología más flexible, clientes más exigentes y nuevos competidores.

Este nuevo entorno puede hacer que la banca minorista en el mundo gane hasta un 36 por ciento menos en diez años, porcentaje que aumenta hasta el 50 por ciento en países con una posición "de mayor riesgo", como Bélgica, Alemania, Italia y España.

De esta forma, en el informe se destaca que, aunque el impacto será diferente en cada país, la situación general no será "muy brillante" en ninguno de los casos si las entidades no acometen importantes reformas.

En este contexto, el estudio también hace referencia a la situación de alguna de las principales entidades españolas.

Así, subraya que la mayor parte de los ingresos de las dos mayores cajas -La Caixa y Caja Madrid- procede de su actividad en España, frente a los dos mayores bancos españoles -Santander y BBVA-, que obtienen más del 50 por ciento de sus ingresos en el extranjero, gracias a su estrategia de internacionalización del negocio.

En un momento especialmente delicado para las entidades financieras, el informe desgrana cuáles son los "cuatro pilares" sobre los que deberían apoyarse estas empresas para aumentar su crecimiento.

Uno de ellos, según el estudio, es la estrategia llevada a cabo por La Caixa y basada en la expansión del negocio a través de una extensa red de sucursales, que la colocaba en 2006 a la cabeza por número de oficinas en España.

Según el informe, las entidades deben seguir diversificando e innovando en sus modelos de distribución para poder mantener sus ritmos de crecimiento.

Por otra parte, el estudio también hace un análisis de los servicios básicos en entidades que pagan los clientes, del que se desprende que los clientes pagaron alrededor de 70 euros en 2007 por los servicios de mantenimiento de cuentas, retirada de efectivo o transferencias de sus respectivas entidades financieras, un 1 por ciento menos que en 2006.

Esta cifra varia entre regiones geográficas y oscila entre los 52 euros que pagan en Asia-Pacífico y los 79 euros de Norteamérica, en tanto que en la zona del euro esta cantidad se sitúa en torno a los 75 euros.

Asimismo, la diferencia en el precio de los servicios bancarios básicos en 2007 en la zona del euro fue del 32 por ciento (1,6 por ciento más que en 2006), si bien en España llegó al 50 por ciento, la segunda cifra más elevada de los países de la zona euro.