COAG y UCE denuncian que aumentaron los precios agrarios en destino un 5,25%

Murcia.-  La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y la Unión de Consumidores (UCE) han denunciado hoy que el precio de los productos agrícolas y ganaderos que se paga en origen alcanzó en agosto una media del 5,25 por ciento cuando llegaron al mercado, de lo que culpan a la gran distribución alimentaria.

ampliar foto

(EFE)

En la imagen, un agricultor observa una plantación de patatas.

Estas organizaciones han presentado en la Cámara Agraria de Murcia el tercer Índice de Precios de Origen y Destino (IPOD) de los alimentos que ambas organizaciones elaboran mensualmente, y que recoge la evolución mensual de los 25 alimentos más básicos.

Este indicador, que muestra la diferencia entre lo que percibe un agricultor por la venta de sus productos y el coste de éstos en el mercado, destaca que la diferencia media en agosto entre el precio pagado al agricultor y el que se cobra al consumidor por un mismo producto agrario es de 5,25 puntos, después de que en julio fue de 4,79 puntos y en junio de 4 puntos.

El mayor desequilibrio de precios se registró en la sandía, que se pagó al agricultor en agosto a 0,07 euros el kilogramo, y que en el mercado alcanzó los 1,03 euros, lo que supone casi quince veces más. Situación similar ocurrió con el pimiento verde, producto en el que la diferencia ha sido de 0,15 a 2,23 euros.

El responsable estatal de mercados agrarios de COAG, Miguel Padilla, dijo en conferencia de prensa que en el caso de la sandía se ha dado la circunstancia que concluía en agosto la campaña y la distribución aprovechó para bajar los precios que pagaba al agricultor, pero esa bajada en lugar de aplicarla a los precios en destino, lo que ha hecho es subirlos aún más al consumidor.

"Cae en saco roto el esfuerzo realizado por el sector productor para promocionar el consumo de fruta en verano si el consumidor no encuentra precios asequibles en los lineales de las grandes superficies", añadió Padilla, quién consideró injustificada la subida de los precios de la fruta cuando las cotizaciones en el campo no llegan a cubrir los costes de producción.

En el caso de las producciones ganaderas (carne de ternera, cordero, pollo, cerdo, conejo, huevos y leche) el IPOD se ha reducido respecto al mes de julio, pasando de un 3,24 a un 2,87, ya que las cotizaciones en origen de la ternera y el cordero han experimentado una ligera subida, mientras que en destino se han mantenido en niveles similares a los del mes anterior.

Padilla apuntó a las posibles causas del repunte de los precios en origen de la carne el que haya tenido lugar una reducción de la cabaña ganadera por la crisis que afecta al sector y el aumento del consumo de estas carnes en un mes que destaca por una mayor presencia de turistas y por la masiva celebración de banquetes de boda.

En el caso de los melones y el calabacín, la diferencia de precios fue de casi once veces más.

El precio en destino que más se ajustó al coste en origen durante el pasado mes correspondió al aceite extra virgen y la judía verde, que se cobraron al consumidor menos de dos veces más caros que su coste en origen.

El IPOD nace dentro de una cuerdo de colaboración firmado entre COAG, UCE y la Confederación Española de Amas de Casa (CEACCU) firmado el 19 de enero del año 2006, con el objetivo de establecer estrategias conjuntas que acaben con el desequilibrio existente en el mercado de productos agrarios, dominado por la gran distribución comercial.

Estas organizaciones han presentado a los principales partidos nacionales el texto de una proposición no de ley sobre márgenes comerciales que pretende mejorar los mecanismos de recogida de los precios y que se implante un sistema de doble etiquetado para que el ciudadano conozca el precio en origen y sepa de la distorsión existente en el mercado.

Por su parte, el presidente de UCE en la Región de Murcia, Pedro Valera, hizo un llamamiento a los consumidores para que boicoteen a las grandes superficies comerciales de las que tengan conocimiento que realizan este tipo de prácticas de abuso tanto al agricultor como al consumidor.

En el caso murciano, advirtió que hay 186.000 familias que viven momentos difíciles por la crisis y que son las más perjudicadas por este tipo de prácticas en los precios de los alimentos.