Nicaragua defiende una nueva forma de gobernar, que devuelve la esperanza al pueblo

Zaragoza.-  La Expo de Zaragoza celebra hoy el Día Nacional de Nicaragua, un país que defiende su nueva forma de hacer gobierno con el objetivo de devolver la esperanza al pueblo, de solucionar los problemas para reducir la pobreza y, en definitiva, de mejorar las condiciones de vida de sus ciudadanos.

ampliar foto

(EFE)

El canciller de la República de Nicaragua, Samuel Santos (d) recibe unos planos del río Ebro de manos del comisario de la Expo, Emilio Fernández-Castaño hoy en el Día Nacional de su país en la Expo de Zaragoza.

Así lo ha asegurado hoy el canciller de la República de Nicaragua, Samuel Santos López, quien ha insistido en los esfuerzos que está haciendo su Gobierno por garantizar un futuro mejor a la población a través de acciones que favorecen de forma directa a los ciudadanos.

En su discurso durante los actos institucionales con motivo del Día Nacional de este país del istmo centroamericano en la Exposición Internacional, Santos ha considerado que el acceso al agua potable "es un derecho" y su carencia una muestra de "extrema pobreza y desesperación".

Por ello, ha lamentado que haya gobiernos en el mundo que "prefieren hacer una guerra" antes que "superar" la situación actual del planeta, donde "uno de cada cinco habitantes no tiene acceso a agua potable" y "el 40 por ciento no dispone de sistema básico de saneamiento".

El agua es un recurso vital y escaso, un "bien no privatizable", ha advertido el gobernante nicaragüense, al tiempo que ha explicado que en su país ha habido un cambio de conducta y de manejo de este recurso y ya se trabaja para llevar agua potable tanto a zonas rurales como a ciudades y mejorar así los niveles de acceso.

Reducir la contaminación de los recursos naturales y por tanto los riesgos sanitarios es otro de los objetivos del Gobierno de Daniel Ortega, ha dicho el canciller, quien ha hecho hincapié en que se debe fomentar la colaboración entre países con la intención de "prevenir situaciones de crisis que devengan en conflictos", en los que la población es la que pierde.

Sobre este asunto, ha señalado que "no se deben permitir enfrentamientos entre hermanos", teniendo en cuenta que, según la UNESCO, en los últimos cincuenta años ha habido más de quinientos conflictos relacionados con el agua, siete de ellos violentos.

Santos López ha aprovechado la ocasión para hablar sobre las "importantes" relaciones que mantienen España y Nicaragua, y ha reconocido que el pueblo nicaragüense ha sido "privilegiado con la solidaridad del pueblo español".

Por su parte, el comisario de la Expo, Emilio Fernández Castaño, ha considerado "excelentes" las relaciones bilaterales entre ambos países y ha insistido en que España está dispuesto a ayudar a Nicaragua, un país "asolado por la guerra y las catástrofes naturales" y que "libra una batalla por el desarrollo sostenible".

Ha mencionado la "privilegiada" situación natural de un país que se encuentra entre los 30 del mundo con más agua dulce per cápita pero que contrasta con una "deficitaria" situación en cuanto la calidad de este recurso y su saneamiento.