Ex banquero brasileño llegó a Brasil extraditado por Mónaco y fue encarcelado

Río de Janeiro.-  El ex banquero brasileño Salvatore Cacciola, condenado en Brasil por fraude financiero y malversación de fondos públicos, llegó hoy a Río de Janeiro tras haber sido extraditado por el Principado de Mónaco e inmediatamente fue recluido en una prisión común, informaron fuentes oficiales.

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(EFE)

El ex banquero brasileño Salvatore Cacciola, condenado en Brasil por fraude financiero y malversación de fondos públicos, ofrece una rueda de prensa hoy, 17 de julio de 2008, en la Policía Federal, en Río de Janeiro (Brasil), tras haber sido extraditado por el principado de Mónaco. Cacciola es considerado un emblema de la impunidad debido a la facilidad con que logró evitar su encarcelamiento y huir a Italia, en donde permaneció varios años amparado por su doble nacionalidad.

Cacciola, que es considerado un emblema de la impunidad en Brasil debido a la facilidad con que logró evitar su encarcelamiento y huir a Italia, en donde permaneció varios años amparado por su doble nacionalidad, llegó esta madrugada al aeropuerto de Río de Janeiro escoltado por ocho agentes de la Policía Federal y un fiscal de la Procuraduría.

El ex banquero, ex propietario del banco Marka, volvió a aprovechar los beneficios de la justicia brasileña a su llegada a Río de Janeiro y, gracias a un hábeas corpus solicitado por sus abogados, desembarcó lejos de los fotógrafos, y sin ser esposado ni presentado a la prensa fue trasladado en coche común.

Tras llegar a Río de Janeiro hacia las 04.30 hora local (07.30 GMT), Cacciola desembarcó del avión en un local de la pista distante del terminal aéreo y fue trasladado a la Superintendencia de la Policía Federal, en donde presentó sus primeras declaraciones y fue sometido a un examen médico.

Después fue trasladado al presidio Ary Franco, una prisión común de Río de Janeiro pero en donde tendrá derecho a los beneficios que la justicia brasileña concede a presos con formación universitaria, como celda separada de los internos comunes.

Según Carlos Eluf, uno de los abogados del banquero, su cliente afirmó que estaba feliz de regresar a Brasil y que confiaba en la Justicia brasileña.

El abogado agregó que ya solicitó otro hábeas corpus a la máxima corte de la justicia brasileña para solicitar la libertad condicional de su cliente en un plazo máximo de diez días.

"La jurisprudencia determina que una persona apenas puede estar presa 82 días cuando tiene en su contra una orden de detención preventiva y él estuvo preso en Mónaco durante diez meses, mientras esperaba ser extraditado a Brasil. También alegamos que no existe una condena definitiva y él aún tiene derecho a recorrer a otros tribunales", afirmó el abogado.

Cacciola fue condenado en 2005 a 13 años de prisión por su responsabilidad en la quiebra del banco Marka y por haberse valido de recursos públicos para recuperar el capital que perdió con la bancarrota de la institución financiera.

Ello debido a que en 1999 convenció a funcionarios del Banco Central a concederle un préstamo para intentar evitar la quiebra del banco y fue favorecido con una operación ilegal que tuvo un costo de 1.200 millones de dólares de la época para los cofres públicos.

El Banco Central justificó la ayuda como una forma de evitar una quiebra sistemática de otros varios bancos en momento en que Brasil había determinado una fuerte depreciación de su moneda.

Pese al escándalo provocado por la quiebra del banco y la ayuda ilegal del Banco Central, Cacciola pasó pocos días en la cárcel y fue puesto en libertad gracias a un hábeas corpus concedido por el Supremo Tribunal Federal.

El ex banquero aprovechó su liberación para viajar a Italia en 2000, en donde permaneció prófugo hasta el año pasado pero viviendo una vida normal debido a que, por tener nacionalidad italiana, no podía ser extraditado a Brasil.

Cacciola apenas pudo ser detenido cuando, en septiembre del año pasado, realizó un viaje de descanso al principado de Mónaco, en donde inmediatamente fue arrestado por la Policía Internacional ya que existía en su contra una orden de extradición que no se aplicaba en Italia pero sí en cualquier otro país europeo.

"Nunca fui un prófugo. Viajé a Italia con mi pasaporte y salí de Brasil con mi pasaporte y libre", afirmó el ex banquero en la primera declaración que concedió al llegar a Río de Janeiro.

Pese a alegar que estaba contento por poder regresar al país para hacer frente al proceso en su contra, Cacciola intentó evitar hasta última hora su extradición de Mónaco.