Los Sanfermines viven una jornada con sabor a despedida

Pamplona (España).-  Miles de personas apuran hoy, con pena, las últimas horas de los Sanfermines de 2008, en los que durante nueve días la ciudad de Pamplona vivió las fiestas españolas más internacionales con auténtico sabor taurino.

Unos festejos que concluirán en la medianoche cuando se entone el "Pobre de mi", que resume el pesar por el final de la fiesta, cita a la que cada año acuden miles de personas desde todas las latitudes del mundo.

Los encierros de los toros, una carrera de un kilometro por el casco viejo de la ciudad, son vistos, sobre todo por los extranjeros, como "algo emocionante, donde a la gente le gusta pasar un poco de miedo y valentía", como relató a Efe el joven colombiano que fue corneado el pasado sábado.

William J.C., que lleva cuatro años viviendo en Madrid, viajó el pasado viernes, junto a otros amigos latinoamericanos, a Pamplona para correr el encierro del sábado, en el que un toro le alcanzó en el muslo derecho y le provocó una herida de doble trayectoria.

Y entre aquellos que llegan para tentar a la suerte por las estrechas calles de Pamplona figuran todos los años neozelandeses, franceses, griegos, británicos, italianos, alemanes y, sobre todo, estadounidenses.

Uno de los heridos más graves de este año es precisamente un corredor californiano, de 22 años, que tuvo que ser trasladado a un hospital tras sufrir un puntazo en el abdomen.

Las fiestas en honor de San Fermín deben su aureola de acontecimiento internacional a otro estadounidense, Ernest Heminngway, cuya novela "Fiesta" ha hecho que cada año miles de visitantes de todo el mundo acudan a Pamplona.

Hoy, tras un fin de semana de lluvia y frío, se celebró el último encierro, protagonizado por la ganadería de Núñez del Cuvillo, que concluyó sin que ningun corredor fuera corneado.

En los nueve días de carreras, este año los toros sólo han dejado cuatro heridos por asta en las calles de Pamplona mientras que en la Plaza de toros, y a falta de la última corrida, han sido cinco los toreros heridos.

Según datos de la Cruz Roja española, los encierros de este año han sido de los mas tranquiloss de la última década con diez heridos menos que en 2007.

El interés mundial por estas fiestas se aprecia en que los encierros son transmitidos por numerosas cadenas de televisión, no solo europeas, sino también japonesas, chilenas y mexicanas.

Hoy, Pamplona dice adiós al jolgorio callejero que comenzó el pasado día 6 con el lanzamiento del cohete anunciador, o chupinazo, y que ha reunido a miles de personas, incluyendo algunos famosos.

Todos ellas, como manda la tradición, se han vestido de blanco y rojo para participar tanto en los festejos taurinos como en los más de cuatrocientos actos programados por el Ayuntamiento de Pamplona, que ha confeccionado un amplio cartel de actuaciones musicales, como la del guitarrista estadounidense Chuck Berry, leyenda viva del rock and roll.

La de hoy es una jornada con sabor a despedida, en la que se retira el vallado del encierro, y en la que los visitantes comienzan a abandonar la ciudad.

Los trabajadores de la limpieza extreman su labor para dejar en su estado original todos los rincones de una ciudad en la que han faltado en los últimos días muchas horas de sueño y han corrido rios de vino y "kalimotxo", mezcla de vino y refresco de cola.