El vallisoletano herido por asta de toro afirma que volverá a correr el encierro

Pamplona.-  Ignacio Frías Revuelta, el vallisoletano herido en el encierro de ayer por asta de toro, en declaraciones a EFE esta mañana, ha reconocido que, a pesar del susto, volverá a correr porque lo "lleva dentro".

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(EFE)

El joven vallisoletano I. F. R, de 28 años, atendido por los servicios de emergencia depués de que uno de los astados le empitonara en el muslo derecho en el tramo de la Calle Estafeta durante el cuarto encierro de San Fermín, con toros de la ganadería toledana El Ventorrillo que han protagonizado un recorrido emocionante por el ritmo de la carrera.

En la habitación del Hospital de Navarra, donde evoluciona favorablemente de sus heridas, narra su experiencia y se define como un aficionado taurino "cien por cien". A sus 28 años, éste es su cuarto año como corredor del encierro de los Sanfermines, aunque confiesa que lleva "toda la vida" viéndolos por la televisión.

"El primer año que vine fue flojito, el segundo fue muy bien porque corrí todos los días menos el fin de semana, el tercero también fue bien, pero este año se ha fastidiado", ha comentado.

El corredor suele realizar sus carreras en los tramos de Mercaderes y la curva de Estafeta, y en ésta fue donde sufrió la cogida. "La gente y los toros me mandaron para fuera de la curva, me caí y creía que no había más toros, fui a levantarme para reiniciar la carrera y justo vino uno que se había quedado rezagado y me hirió", ha relatado.

Ha recordado el momento de la cogida como breve, cuando se encontró cara a cara con 'Temerario' que le alcanzó y le lanzó hacia arriba. "Recuerdo que estaba en el suelo, que había gente cayéndose y muy nerviosa; a partir de ese momento todo fue muy deprisa, sabía que el toro me había tocado y enseguida vinieron a socorrerme. Estuve tranquilo en todo momento porque no tenía sangre, ni siquiera el pantalón roto".

La cornada fue en el muslo derecho y le provocó una herida de dos trayectorias, la primera ascendente de 10 centímetros que le afectó al tejido subcutáneo y la segunda de 15 centímetros, hacia dentro.

El corredor, que fue intervenido quirúrgicamente nada más llegar al hospital, califica tanto el dispositivo de socorro de los encierros, como la atención hospitalaria de "maravillosa", y ha apuntado que "en cierto modo" ha tenido "la suerte de que me tocase en Pamplona, porque el servicio navarro de salud es espléndido".

Frías no duda que volverá a correr el encierro y así, nada más salir del quirófano, el corredor preguntó cuándo podría volver a correr, pero tendrá que esperar a los Sanfermines del año que viene, pues se espera que reciba el alta médica en seis días.

Ha venido sólo a Pamplona con la intención de correr todos los encierros, y aunque no va a cumplirse su deseo, se siente muy animado y querido: "el móvil no ha parado de sonar y descubres cuáles son los verdaderos amigos".