El lado más emotivo de la liberación de Betancourt

El aeropuerto militar de Catam, en Colombia, ha sido el escenario privilegiado de unas lágrimas que llevaban seis años acumulándose. El llanto alegre, desahogado y feliz del reencuentro de Ingrid Betancourt con su familia. A su lado, abrazándola en todo momento, sus hijos. Melanie y Lorenzo tenían 16 y 13 años respectivamente la última vez que vieron a su madre. Hoy, sus rostros colorados, sus ojos hinchados e irritados y sus voces temblorosas son la imagen más sincera de la felicidad, de "un momento fuerte y bello", tal y como lo ha descrito Melanie.

Jorge Silva (REUTERS)

Ingrid Betancourt junto a su hija Melanie. Por fin, tranquilidad.

Anoche fue el momento de los agradecimientos a Uribe. "Presidente, sonría", le decía Betancourt, "y siéntase orgulloso por este momento de gloria". Fue la hora de aplaudir a los militares: "Gracias al ejército mío de mi patria Colombia", proclamaba Betancourt, celebrando una operación que fue "absolutamente impecable".

Hoy, siguen los agradecimientos, y la familia de la política franco-colombiana ha matizado su tradicional posición contra los operativos militares. Melanie Delloye, la hija mayor de Betancourt, ha explicado que siempre han estado en contra la de las operaciones por la fuerza porque "suelen ser a sangre y fuego": "Pero este operativo no fue un operativo militar, fue un operativo inteligente".

Pero pronto todo eso ha quedado atrás. Ahora, era el momento de las lágrimas y la emoción. De contemplar a su hija, "con su cuerpito de mujer y le dejé cuando era una niña". Tal y como dijo la recién liberada, era el momento de pegarse a sus hijos "como una chinche" comérselos a besos.

Además, la familia al completo, acompañados del ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, se ha querido acordar también de los que aún siguen en manos de la guerrilla colombiana. "Toda la familia pensamos muy fuerte en los que desaparecieron", aseguró Lorenzo Delloye, el hijo menor de Betancourt, "Esa gente sí era el honor de Colombia".

Melanie y Lorenzo nacieron del primer matrimonio de Ingrid Betancourt, con el diplomático francés Fabrice Delloye, con quien estuvo casada desde 1981 hasta 1990, cuando se divorció. Tanto Delloye, como el segundo marido de Betancourt, el publicista colombiano Juan Carlos Lecompte, han estado hoy arropándola en el aeropuerto de Catam.

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