Ivanovic y Ferrer patinan; Feli y Verdasco siguen haciendo hueco

Londres.-  La campeona de Roland Garros y número uno del mundo, Ana Ivanovic, no pudo hoy con la china Jie Zheng en la quinta jornada, en la que Feliciano López y Fernando Verdasco siguen abriendo camino al tenis español, que perdió a Anabel Medina y a otro de los "top ten", David Ferrer, quinto favorito.

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(EFE)

El tenista español Fernando Verdasco corre hacia una bola ante el checo Tomas Berdych durante el partido que les ha enfrentado en la tercera ronda del torneo de Wimbledon que se disputa en el All England Lawn Tennis Club de Londres, Reino Unido.

"Feli" ventiló su partido en 2 horas y cuarto ante el estadounidense Bobby Reynolds por 6-4, 7-5, 4-6 y 6-4, y su siguiente rival será el chipriota Marcos Baghdatis, el décimo cabeza de serie.

De ese jugador, el toledano observó que es un tenista "duro" y destacó su pericia en la superficie rápida. "Es bastante completo, juega bien de fondo, no saca mal, resta bien", comentó.

Eso sí, el español, que está muy pendiente de la selección española en la Eurocopa, en la que jugará este domingo la final con Alemania, se mostró positivo de cara al siguiente duelo para el que apostó por "seguir jugando igual, convencido de que puedo ganar".

Otro miembro de la flota española que estuvo de celebración fue Fernando Verdasco, quien completó un partido de nota para dar una zancada a octavos tras superar al checo Tomas Berdych por 6-4, 6-4 y 6-0.

Verdasco lanzó saques a 210 kilómetros por hora, convirtió 11 'aces' y aprovechó cinco de las diez bolas de rotura de las que dispuso -el checo no tuvo ninguna en todo el partido- y sólo falló en una de sus aproximaciones a la red.

El jugador se mostró más que satisfecho de su juego y aseguró que el de hoy fue uno de los "mejores partidos" de su vida.

El zurdo será el próximo español que se enfrente al croata Mario Ancic, verdugo hoy del alicantino David Ferrer, quien pese a la derrota, ascenderá al número 4 del mundo en el ránking mundial al término del torneo.

Éste peleó en la pista Central ante un rival que se mostró intratable y que selló su clasificación a la cuarta ronda con un doloroso 6-4, 6-4, 7-6 (5) y 7-6 (3).

En la categoría femenina, haciendo un balance muy positivo, ya que es la primera vez que alcanza la tercera ronda en el All England Club, se marchó hoy del cuadro individual Anabel Medina, que sucumbió a la húngara Agnes Szavay, decimoquinta cabeza de serie, pese a que la valenciana dispuso de opciones.

Szavay, que logró 6 "aces" durante el partido (Medina no firmó un solo saque directo), se batirá a la china Jie Zheng, la mujer que ha truncado la andadura por la hierba londinense de la número 1 del mundo, la serbia Ivanovic.

Eso sí, tras el duelo en la pista 18, Medina no perdió la oportunidad de comentar, algo irónica, el hecho de que su rival se hubiera ido al servicio tras el segundo set, que ganó la española. "He tenido mis opciones pero se ha ido al baño en el tercer set, como hacen todas cuando pierden el segundo set, para cortar el ritmo y de hecho me lo ha cortado", lamentó.

Por lo demás, no hubo sorpresas en el pulso que libró el suizo Roger Federer, cinco veces campeón de Wimbledon y número 1 del mundo, ante el francés Mark Gicquel. Se notó la clase del primer favorito, que casi ni se despeinó para arrollar en tres sets (6-3, 6-3 y 6-1) en 1 hora y 21 minutos.

Federer, al que el jugador galo hizo "break" en el primer juego de la primera manga en la pista Central, se enfrentará al australiano Lleyton Hewitt, vigésimo favorito y ex campeón, también, en Wimbledon, en 2002, que superó hoy su choque ante el italiano Simone Bolelli.

La gran sorpresa la dio la serbia Ana Ivanovic, primera favorita en Wimbledon y campeona de Roland Garros, barrida por la raqueta de la china Jie Zheng, por 6-1 y 6-4, en una hora y 12 minutos.

Fue un desenlace inesperado. La serbia, semifinalista el año pasado en Londres, finalista esta temporada en Australia y vencedora en París, cayó derrotada ante una tenista que nunca ha pasado de tercera ronda en Wimbledon y que ha acudido a la edición de este año gracias a una "wild card", una invitación de la organización.