Dos nuevas unidades refuerzan la seguridad de los pescadores del Cantábrico

Santander.-  Salvamento Marítimo ha reforzado las labores de apoyo y socorro que ofrece a los barcos pesqueros del Cantábrico oriental (Cantabria y País Vasco) con la incorporación del remolcador "María de Maeztu" y del helicóptero "Helimer 204", que tendrá su base en Santander.

ampliar foto

(EFE)

Salvamento Marítimo ha reforzado las labores de apoyo y socorro que ofrece a los barcos pesqueros del Cantábrico oriental (Cantabria y País Vasco) con la incorporación del remolcador "María de Maeztu" y del helicóptero "Helimer 204", que tendrá su base en Santander.

Estas dos nuevas unidades han sido presentadas hoy en el muelle de Albareda del Puerto de Santander por el delegado del Gobierno en Cantabria, Agustín Ibáñez, y por el consejero de Presidencia y Justicia del Gobierno regional, Vicente Mediavilla, junto a representantes de la Guardia Civil, la Armada y Salvamento Marítimo.

Ibáñez ha destacado la importancia de este hecho para la seguridad de los 1.500 cántabros que se dedican a las labores de la pesca en barcos y "para todos los pescadores del Cantábrico oriental".

El delegado del Gobierno ha recordado que en septiembre comenzará la campaña de bonito que concentrará a cerca de 500 barcos pesqueros en el Cantábrico.

"Estas unidades servirán de apoyo a los pesqueros que siguen la migración del bonito", ha apostillado.

El "María de Maeztu", que realizará labores de vigilancia en las costas de Cantabria y el País Vasco, es un remolcador, recién salido del astillero, de 39,70 metros de eslora, que puede recorrer, a velocidad de crucero, 6.000 millas, casi 11.000 kilómetros.

Es el primero de los cuatro que la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima, dependiente del Ministerio de Fomento, tiene previsto incorporar a lo largo de 2008.

Está especialmente diseñado para asistir en el mar a barcos con problemas, a los que puede remolcar y apoyar, con el suministro de electricidad o combustible, según ha explicado el capitán del barco, Ángel Téllez.

El capitán ha destacado que el diseño y las nuevas tecnologías que incorporan este barco "reducen el tiempo de respuesta" ante una emergencia en el mar.

El nuevo remolcador tiene una tripulación de 12 personas, una capacidad de arrastre de hasta 60 toneladas, puede trasladar hasta 50 náufragos y está dotado con las últimas tecnologías en radares y telecomunicaciones, ha explicado Téllez.

Por su parte, el "Helimer 204" es un helicóptero biturbina Eurocopter Dauphin AS-365 N2, que puede alcanzar una velocidad superior a los 130 nudos y con una autonomía de vuelo de cerca de 450 kilómetros.

Con la incorporación de este helicóptero, Salvamento Marítimo tiene en servicio nueve unidades aéreas de este tipo y refuerza la cobertura en esta zona del Cantábrico, ha destacado Ibáñez.

El delegado del Gobierno en Cantabria, ha explicado que estas dos unidades presentadas hoy en Santander forman parte del Plan Nacional de Salvamento 2006-2009 (PNS 2006-2009), que el Consejo de Ministro aprobó con un presupuesto de 1.023 millones de euros para la modernización de los equipos para el salvamento y la lucha contra la contaminación marítima.

Mediante esta iniciativa, el Ministerio de Fomento prevé dotar a Salvamento Marítimo en 2009 de diez helicópteros, ocho de ellos de nueva construcción y, "por lo tanto en propiedad, ha apuntado Ibáñez, y los otros dos fletados.

De estos ocho nuevos helicópteros, ya se han incorporado tres (Reus, Tenerife sur y Gijón), mientras que otras dos unidades, encargadas en 2006, serán entregadas en octubre de este año y en febrero del próximo.

Los nuevos helicópteros, uno de los cuales tendrá su base en Santander, sustituirán progresivamente a las unidades fletadas, ha explicado el delegado del Gobierno en Cantabria.