Las patronales reciben los incentivos de Chávez con más críticas que aplausos

Caracas.-  Los gremios patronales venezolanos de oposición recibieron hoy con críticas y pocos aplausos los incentivos que el presidente Hugo Chávez anunció anoche para la empresa privada, a la que llamó a aliarse a su socialismo.

Además de eliminar deudas e impuestos, agilizar la importación y crear un fondo para los empresarios por 1.000 millones de dólares, de los 75.000 millones que prevé entrarán este año por la venta petrolera, Chávez les pidió invertir en el país y combatir la inflación conjuntamente.

Fueron anuncios "intrascendentes que para nada van a disminuir la inflación", dijo el presidente de Fedecámaras, la principal patronal nacional, José Manuel González, quien criticó "la vagabundería" que identificó en la eliminación de las deudas de algunos empresarios.

Éste y otros presidentes gremiales no figuraron entre el medio millar de empresarios que asistió al palacio presidencial a escuchar a Chávez, entre ellos Oswaldo Cisneros, Lorenzo Mendoza y Juan Carlos Escote, del grupo de los denominados "emblemáticos", quienes en las primeras horas posteriores a los anuncios no expresaron comentarios.

"Del rumbo socialista no nos apartará nada ni nadie" y, sin excluir a los empresarios, seguiremos avanzando "por la izquierda, para recolocar al Estado en el lugar que debe estar", dijo Chávez.

Destacó que durante este año no habrá trabas a los importadores que les pidan divisas, en el marco del control estatal de cambio vigente junto a un adicional control estatal de precios y tarifas, pero siempre que no le requieran más de 50.000 dólares.

"Premia la importación con la eliminación de los requisitos para obtener 50.000 dólares, aunque eso no es nada tampoco", agregó González, para quien Chávez "perdió una oportunidad de oro" para anunciar la eliminación de la intervención estatal en la economía.

La búsqueda de Chávez de un trabajo conjunto con los privados para bajar una inflación que llegó al 22,5% el año pasado y que en los primeros cinco meses de 2008 ya acumula un 12,4%, no se alcanzará si a la vez dice que no reducirá el gasto público, alertó.

"El presidente fue muy claro al decir que seguirá habiendo dinero en la calle, mucha demanda de bienes y presión inflacionaria" y así "la inflación seguirá galopante", previó González.

El escenario registra una desaceleración adicional de la economía, que el primer trimestre alcanzó un repunte de 4,8%, frente al 8,8% del mismo período de 2007, y que este año registrará un avance de entre 5% y 6%, añadió Chávez.

También en busca de esa meta anunció la eliminación del Impuesto a las Transacciones Financieras que cobraba el 1,5 por ciento del monto del movimiento bancario de cualquier transacción empresarial.

"En un país con los recursos petroleros que se tienen ahora no se justifica ningún impuesto", añadió González, en lo que coincidió Eduardo Gómez, presidente del principal gremio industrial.

Este advirtió asimismo que Chávez hizo hincapié en la importancia de la producción interna, pero a la vez premia a los importadores.

"Esto, en este Gobierno, se ha convertido en un vicio", dijo y sugirió visos de corrupción en las importaciones a cargo del Estado.

También lamentó que el gobernante no aludiera a otros asuntos, tales como la conflictividad laboral.

"¿Cómo quiere (Chávez) un aumento en la producción si las empresas tienen paralizaciones constantes y recurrentes por una conflictividad laboral promovida por el mismo Gobierno, creando los sindicatos paralelos?", se preguntó Gómez.

En todo caso, evaluó que los anuncios, "sin duda", reflejan "una buena disposición" del Gobierno, aunque a la par que "no se atiende el problema", agravado por un déficit de "seguridad jurídica" que desalienta la inversión privada nacional que Chávez demanda.

"El presidente sigue insistiendo, es su tema, de que aquí la economía es socialista, de controles y de regulaciones, que aquí no habrá libre mercado", criticó aunque calificó de "oportuno" que eliminara el Impuesto a las Transacciones Financieras.

También identificó "una motivación temporal electoral", de cara a los comicios municipales y regionales de noviembre, el anuncio de más agilidad burocrática para que los empresarios accedan con mayor rapidez a las divisas que administra el Estado.

El presidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga), Genaro Méndez, también interpretó que los incentivos estatales son para los importadores y no para los productores, por lo tanto "no indican que vayan a mejorar la situación agropecuaria".