Jamenei niega que Irán busque el arma nuclear y pone en duda su utilidad

Teherán.-  El líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei, negó hoy que su país busque el arma nuclear y puso en duda la utilidad de poseerla.

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(EFE)

El líder supremo iraní, ayatolá Ali Jamenei, ejerce su derecho al voto para las elecciones parlamentarias en un colegio electoral de Teherán (Irán) el pasado 14 de marzo.

En un discurso con motivo del aniversario de la muerte del fundador de la República Islámica, Ruholá Jomeini, el ayatolá Jamenei dijo que "el pueblo iraní no está tratando de conseguir armas nucleares, pero sí se está esforzando por alcanzar el uso pacífico de esta energía, que conseguirá pese a sus enemigos".

En una alocución desde Teherán, televisada para todo el país, añadió que "las armas nucleares, cuyo gasto de mantenimiento es muy elevado, no aportan fuerza a los países", al resaltar que si las grandes potencias emplean estas armas tendrán que pagar las consecuencias.

Según Jamenei, los países occidentales acusan a Irán de querer conseguir armas nucleares, mientras que el empleo de éstas "está prohibido por las enseñanzas religiosas del islam".

Las conmemoraciones comenzaron con este discurso en una gran ceremonia en el mausoleo de Jomeini en el sur de Teherán, al que asistieron más de dos millones de personas, según la agencia oficial de noticias iraní IRNA.

En el acto participaron los más altos responsables políticos y militares iraníes, así como embajadores y agregados diplomáticos de otros países, según la agencia.

La máxima autoridad en el régimen de los ayatolás calificó de "fracasada" la política de EEUU hacia Irán y alabó la personalidad de Jomeini, entre los gritos de la multitud de "muerte a América", "muerte a Israel" y "Dios es el más grande, Jamenei es el líder".

Para el actual líder supremo, Jomeini, que murió hace 19 años, convirtió Irán en un modelo para todos los pueblos musulmanes, y por lo tanto "hay que mantener vivo su recuerdo".

Hijo de una familia religiosa procedente de la India, Jomeini nació en 1902, fue criado en la aldea de Jomein, al sur de Teherán, y a los 18 años comenzó su carrera religiosa, que le llevó en 1961 a obtener el títulos de ayatolá.

Jomeini, conocido también como el "ayatolá hindi" por su origen indio, se exilió en 1962 por su rechazo a las importantes reformas políticas, agrarias y sociales introducidas por el Sha, Mohamed Reza Pahlevi, por las cuales la mujer obtuvo el derecho a voto y se le concedió el estatus de igualdad social.

Jomeini, establecido en Francia tras ser rechazado por Turquía e Irak, siguió con su lucha política contra la monarquía desde el exilio y finalmente regresó a Irán tras la revolución de 1979, cuando fue instaurada la República Islámica.

Un año después, Jomeini, que había anunciado en principio que dejaría la política y seguiría la vida religiosa en Qom, pasó a gobernar el país con mano de hierro y estableció rígidas normativas islámicas que se cumplieron al pie de la letra en los siguientes anos.