Vicente Irisarri concreta que habría que "hablar claro sobre Astano ya"

Ferrol.-  Vicente Irisarri, ingeniero naval de 57 años, pilota desde hace un año la coalición PSOE-IU en el gobierno local de Ferrol, tiempo del que hace un hace un balance "optimista y positivo" en una entrevista con Efe en la que es rotundo en asuntos como Astano, del que "habría que hablar claro".

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(EFE)

Vicente Irisarri, ingeniero naval de 57 años, pilota desde hace un año la coalición PSOE-IU en el gobierno local de Ferrol, tiempo del que hace un hace un balance "optimista y positivo" en una entrevista con Efe en la que es rotundo en asuntos como Astano, del que "habría que hablar claro".

Pregunta.- En pocas palabras. Haga su balance de este primer año de gobierno.

Respuesta.- Hago un balance positivo porque así lo pienso. Por primera vez en muchos años, el empleo ya no es el primer problema de los ciudadanos. En Ferrol ya no está aumentando el desempleo, estamos a punto de despegar.

P.- ¿Cuáles serían ahora esos problemas?

R.- Tenemos las mismas preocupaciones que cualquiera otra de las grandes ciudades de Galicia. Aquellos que se derivan de la gestión urbanística, problemas con la policía local, etcétera... Está ciudad se había especializado en demoler, no en construir, en echar las culpas a los demás. Ya no nos lamentamos del castigo y del agravio permanente de otras Administraciones públicas hacia Ferrol.

P.- Su primer año como alcalde fue también su debut en la política local. ¿En que situación encontró la ciudad?

R.- Muy crispada y dividida. Empleamos muchas horas y tiempo en detener auténticas barbaridades urbanísticas. (Cita como ejemplo la paralización de las obras de la plaza de España y el proyecto para la urbanización de la fraga de Menáncaro, ambos paralizados por el actual ejecutivo). Había muchas cosas que ordenar.

P.- El mejor y el peor momento del mandato.

R.- El mejor, quizás, fue confirmar lo que imaginaba, que las demás Administraciones colaboran de forma decidida con Ferrol. El peor, o lo que me genera cierta ansiedad, es que los distintos colectivos crean que tenemos la varita mágica para arreglar en un mandato cuestiones que se arrastran durante décadas. Más que momentos concretos, serían sensaciones concretas.

P. Gobierna en coalición con IU. ¿Son un matrimonio bien avenido?

R.- Hay que emplear muchísimo tiempo en consensuar opiniones entre las parte, y eso dificulta la rapidez de la gestión pero creo que estamos entendiendo bien las posiciones de cada uno. En el PSOE, damos imagen de sensatez y buen juicio, por nuestra falta de extremismo. Aunque la gestión municipal es más farragosa que lo que yo había conocido.

P.- Valore el papel de la oposición.

R.- Con respecto a la oposición -que lidera el grupo popular- creo que interrumpe el trabajo creativo a base de incordiar con muchas cuestiones que jurídicamente no van a progresar. Estoy sorprendido por la dureza en los plenos. Hay un punto de comedia en la política.

P.- Mantiene abierto un conflicto con un sector de la Policía Local desde hace mes, concretamente el que lidera UGT.

R.- Hicimos una política de mano tendida, firmamos un preacuerdo con CCOO y CIG. Esperaba una tregua temporal. No entiendo esta intransigencia feroz. Ese empecinamiento esconde razones personales de resentimiento. No entiendo como la UGT no intenta eliminar ese corporativismo exacerbado y malentendido por parte de algunas personas de su sindicato.

P.- ¿Cómo cree que se ve la ciudad desde otros puntos de Galicia?

R.- Desde fuera nos ven como una ciudad cargada de posibilidades. En la comarca hay muchos metros de suelo industrial, el puerto exterior y una enorme riqueza ambiental y patrimonial.

P.- Sin embargo, el puerto exterior sigue sin acceso y el futuro de los terrenos denominados ociosos de Astano aún no se han concretado.

R.- Habría que hablar claro sobre Astano. Que Navantia concrete si es imprescindible esa capacidad industrial para la buena ejecución de los contratos adjudicados. Los terrenos ociosos son industrialmente muy valioso y deberían ponerse a disposición de la industria gallega. Hoy siguen siendo una incógnita que a Ferrolterra le interesaría que se despejase.

P.- ¿Y el puerto exterior? Una infraestructura todavía sin carretera y con el tren en suspenso.

R.- Estamos pagando la primera factura de una mala planificación con la carretera. Y hay que tener en cuenta que los procesos de maduración del ferrocarril son muy largos.

Ese problema ya lo estamos empezando a compartir Ferrol y A Coruña, que ven con incredulidad como van a tener los mismos problemas que el puerto exterior de Ferrol. Veo que se echan los presupuestos del 2009 y no se acaba de centrar el tema. Es un tema grave. Y es clave acelerar los polígonos industriales de Leixa y Mandiá. Son catalizadores de crecimiento clarísimos.

P.- En este año la Xunta y el Gobierno central han echado más de una mano. ¿Qué pasa si cambia el gobierno autonómico en las próximas elecciones?

R.- Yo, por mi carácter, creo que me entendería bien con el PP llegado el caso, pero creo que la travesía en el desierto del PP en Galicia no ha terminado todavía. No sé con que correlación de fuerzas pero sé que el próximo presidente de la Xunta será socialista y será Touriño.

P.- ¿Qué cambiaría de Ferrol en este instante?

R.- El aspecto de la ciudad. Que no de sensación de abandono y dejadez. La estética, la iluminación, el orden en las calles, el pavimento, el ajardinamiento, los parques, jardines y aceras. Nos merecemos un suspenso.

P.- ¿Cómo afrontará el resto del mandato?