La situación de la ganadería es insostenible y necesita un Plan de Choque, según UPA-UCE

Mérida.-  UPA-UCE Extremadura ha definido hoy como "insostenible" la situación actual de la ganadería y ha defendido la puesta en marcha de un Plan de Choque que controle las importaciones de carne de países terceros en Europa a través de una Ley de Márgenes Comerciales.

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(EFE)

En la imagen, movilización de ganaderos para denunciar la crisis del sector.

La agricultura y la ganadería deben de ser sectores estratégicos para Europa, cuyas autoridades deberían controlar las fronteras y hacer frente a la crisis, que ha provocado el cierre de 2.500 explotaciones en Extremadura y 65.000 en España en el último año y medio, según ha manifestado hoy el secretario general de UPA-UCE Extremadura, Ignacio Huertas, en rueda de prensa.

Huertas ha anunciado que unos 2.000 ganaderos extremeños acudirán el próximo 7 de mayo a Madrid a la manifestación que ha convocado esta organización agraria frente al Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, para protestar por la situación que viven actualmente los ganaderos al verse obligados a vender por debajo de los costes de producción.

Con esta manifestación, los ganaderos quieren denunciar las pérdidas económicas que han sufrido y que superan los 76 millones de euros en Extremadura y rondan los 1.900 millones de euros en España, lo que refleja, a juicio del dirigente agrario, una crisis estructural.

Según Huertas, el control de fronteras propuesto por la agrupación agraria no eliminaría la libre competencia entre países, sino que establecería un control en el abuso de los márgenes comerciales, al igual que han hecho países como China con el arroz.

También ha explicado que la crisis se ha agravado a partir del incremento del precio de los piensos y las materias primas, que han subido por encima del 35 por ciento, mientras que los precios finales del vacuno y el cerdo sólo han experimentado una subida del siete por ciento.

Este desajuste necesita impulsar unos códigos de buenas prácticas comerciales que autorregulen los márgenes entre origen y destino y eviten las prácticas abusivas de los intermediarios, que, en opinión de Ignacio Huertas, manipulan y distorsionan los importes recibidos por los productores.

En este sentido, ha denunciado que el 49 por ciento de toda la producción española está en manos de tres grandes cadenas comerciales, que determinan los ingresos de 900.000 explotaciones y unas 4.000 asociaciones, y han generado que éstos vendan sus productos por debajo de los costes de producción.