Ben Alí califica de "ejemplares" las relaciones franco-tunecinas

Túnez.-  El presidente tunecino, Zine el Abidín Ben Alí, calificó las relaciones de su país con Francia de "ejemplares", en una declaración hecha hoy a la prensa con motivo de la visita de Estado del presidente de Francia, Nicolas Sarkozy.

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(EFE)

El presidente tunecino, Zine el Abidín Ben Alí, calificó las relaciones de su país con Francia de "ejemplares".

"Nuestras relaciones son excelentes y privilegiadas y están llamadas a intensificarse... porque hay que adaptarlas a las nuevas prioridades de los dos países, teniendo en cuenta que Túnez en los últimos dos decenios ha pasado a ser un país emergente", destaca el mandatario tunecino.

Tras recordar que cerca de medio millón de sus compatriotas viven en Francia, afirma que una de sus preocupaciones es que ellos gocen plenamente de los derechos que les garantizan las leyes francesas, felicitándose en ese sentido "por la actitud positiva de las autoridades de Francia".

Al evocar el proyecto francés de Unión para el Mediterráneo, Ben Alí subraya que lo sostiene por estar convencido de que el Mediterráneo tiene que ser un espacio de paz, cooperación y solidaridad.

"Túnez tomó parte activa en la elaboración y puesta a punto del proceso (euromediterráneo) de Barcelona, ha sido el primer país de la ribera sur en concluir un acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE)y desde principios del año en curso es la primera en entrar en una zona de libre cambio con la UE", recuerda.

Advierte, sin embargo, más adelante que el futuro del proyecto francés depende en gran parte de la participación de todos los países concernidos "y tanto Túnez como Francia comparten esa misma visión".

Insiste, por otro lado, en que Túnez considera que el diálogo entre civilizaciones y culturas constituye uno de los fundamentos de su política exterior "porque procede de nuestra fe en el diálogo como instrumento para resolver pacíficamente las diferencias, y nuestra convicción profunda de que la paz y el desarrollo no pueden asegurarse en un contexto de conflictos entre civilizaciones".

Haciendo referencia por último a los altos precios del petróleo y los alimentos, el presidente tunecino, dice que sus consecuencias son graves para las economías de los países del Sur... y en esa coyuntura tendría que prevalecer la solidaridad "como deber moral y responsabilidad colectiva"de la comunidad internacional.