El texto demanda progreso para situar a Castilla y León entre las regiones más avanzadas

Valladolid.-  El Manifiesto "Villalar 2008", que será leído en la campa de este municipio el próximo día 23 con motivo del Día de Castilla y León y que homenajea a "la generación" del primer estatuto de autonomía, reclama el progreso conjunto para situar a la región "al nivel de las comunidades más avanzadas".

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(EFE)

El presidente del parlamento regional, José Manuel Fernández Santiago (i), observa como el secretario regional del sindicato UGT, Agustín Prieto (c), firma el Manifiesto de Villalar 2008 que esta tarde se ha presentado en las Cortes de Castilla y León, un texto reivindicativo que se elabora con motivo del Día de Castilla y Léon, y que este año cuenta con el apoyo de todos los grupos políticos, sindicatos, organizaciones agrarias, y con la única excepción de la patronal CECALE.

El secretario regional de IU, José María González, ha presentado hoy el texto ante los medios de comunicación tras la firma del mismo por once organizaciones con la excepción de la organización agraria ASAJA y de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (CECALE), que no han rubricado el manifiesto.

Éste, titulado "La generación del Estatuto", comprende dos densos folios en los que se recogen los principales retos y problemas de la Comunidad y que está marcado por la celebración de los veinticinco años de autonomía y por el recién estrenado Estatuto.

El texto, que será leído en la campa de Villalar por el primer presidente de Castilla y León, Demetrio Madrid, homenajea a "una generación de jóvenes que ha crecido con nuestro Estatuto de Autonomía" y que "abrió las puertas" al autogobierno, según se lee en el primer párrafo.

Castilla y León, que "ha avanzado mucho en estos 25 años", tiene como reto "seguir progresando con la participación de todos y en especial con la energía de los jóvenes" y "mejorar aún más para situarnos al nivel de las comunidades más avanzadas".

Para lograr ese objetivo Castilla y León cuenta con el nuevo Estatuto de Autonomía que constituye "un auténtico proyecto de futuro" para la Comunidad, según el manifiesto.

El texto reclama la transferencia de las competencias pendientes, en especial las de justicia, y la reforma del sistema de financiación autonómica para lo que es necesario "el máximo acuerdo" entre las fuerzas políticas y el consenso con las demás comunidades autónomas para lograr "una financiación justa y suficiente".

El manifiesto aboga por el impulso de un modelo territorial que "atienda a criterios basados en un desarrollo equilibrado, solidario y sostenible" para "ordenar un espacio común, físicamente articulado, económicamente integrado y socialmente cohesionado".

Reclama, además, la colaboración entre las diferentes administraciones públicas para "hacer frente a la desaceleración económica", lo que requiere inversiones del Gobierno central y regional en las infraestructuras, en los ejes de comunicación y de redes tecnológicas y en políticas que faciliten el acceso a la vivienda.

"El buen clima de diálogo social es un activo fundamental para afrontar los problemas de nuestra economía", según defiende el texto, que califica la creación del Consejo del Diálogo Social como "un paso adelante hacia la democracia participativa".

Defiende también el manifiesto que la mejora de la competitividad y productividad de las empresas de la región deben ir acompañadas de "la igualdad de acceso y de oportunidades", de la "estabilidad y la calidad en el empleo, con salarios más justos, con unas condiciones de trabajo dignas y con la garantía de protección de la negociación colectiva para todos los trabajadores".

Asimismo, el texto pide que los poderes públicos apliquen medidas contra la deslocalización de empresas en la Comunidad y pone como ejemplo el cierre de la papelera Smurfit, en Valladolid.

Demanda, también, "medidas urgentes" con las organizaciones agrarias para afrontar la crisis del sector, para lo que sugiere que se debe "equilibrar la oferta y la demanda, combatir las prácticas desleales y las posiciones de dominio y corregir las consecuencias de las plagas".

Además, el texto defiende para el sector agrario medidas que permitan "unos precios que cubran los costes de producción y permitan una correcta distribución de los márgenes comerciales", entre productores e intermediarios.

En el ámbito social, el manifiesto exige la colaboración institucional para "agilizar los servicios previstos en la Ley de Dependencia" y el compromiso para "prevenir la violencia contra las mujeres y los niños, y para perseguir y condenar a los maltratadores y asesinos".

Por último, el texto hace un llamamiento a la sociedad para que se erradique de la Comunidad "cualquier tipo de violencia o discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo religión y opinión", según proclama la Constitución.

El manifiesto ha sido suscrito por CAVECAL-Confederaciópn de Vecinos, CC.OO, COAG-Castilla y León, Consejo de la Juventud, IU, PP, PSOE, TC, UCCL, UGT y UPA.