El radar de Djokovic se mantiene activo en Miami

Madrid.-  El Masters Series de Miami se abre esta semana con un jugador, el serbio Novak Djokovic, especialmente motivado tras su triunfo en Indian Wells, dispuesto a defender con éxito el título conquistado el pasado año y aprovechar al máximo sus mejores armas en el último torneo de la temporada americana en pista dura antes de que llegue la tierra batida.

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(EFE)

El serbio Novak Djokovic, reciente ganador del Torneo de Indian Wells.

La debilidad del suizo Roger Federer, batido por el estadounidense Mardy Fish en las semifinales de California, y la victoria de Djokovic ante Nadal en esa misma ronda han proporcionado al de Belgrado la confianza necesaria para impulsarse y colocarse a solo 425 puntos del español, aunque a 1.270 del helvético, aún lejos de su punto de mira, pero fijado ya en su particular radar.

Líder de la Carrera de Campeones, y tercero en la que realmente vale, la de Entradas, Novak Djokovic ha hecho que la guerra por el número uno sea ya cosa de tres, porque el resto, con el ruso Nikolay Davydenko (4) y el español David Ferrer (5), como primeros desafiantes, se encuentran a más de 2.500 puntos del triángulo que forman Federer-Nadal-Djokovic. Pero tendrá que esperar, porque suceda lo que suceda, no habrá cambios en los tres primeros puestos de la lista que interesa cuando acabe el torneo de Crandon Park.

El serbio ha calificado este comienzo de temporada como algo soñado. Campeón en el Abierto de Australia, su primer grande, parece haber añadido a su innegable potencial la experiencia necesaria para ganar en los momentos y en los torneos importantes.

"Creo que he reunido todo y creo en mi mismo mucho más de lo que solía hacer el año pasado", sentenció en Indian Wells donde ganó su noveno título, para añadir: "Cuando uno comienza a ganar torneos grandes demuestras, a ti en primer lugar, y luego a los demás, que tienes la calidad necesaria para estar entre los mejores. Es una cuestión de habilidad mental y técnica. He trabajado en ello durante los dos últimos años y creo que he ganado en experiencia", añadió.

Parte de esas armas las mostró Djokovic el año pasado en este mismo torneo cuando lo acabó ganando sin ceder un set, tras vencer a Nadal en cuartos, a Andy Murray en semifinales y al argentino Guillermo Cañas en la final. El serbio sabe que además de defender el título en Miami, todo lo que consiga ahora le vendrá muy bien para la temporada de tierra batida que comienza justo después de la primera ronda de Copa Davis, del 11 a 13 de abril.

En tierra sus resultados fueron dispares en 2007, con octavos en Montecarlo, título en Estoril, cuartos en Roma y Hamburgo y semifinales en Roland Garros. Ahí sabe que los efectos de Nadal y la pujanza del resto del ejército español-latinoamericano puede pasarle factura.

Miami será también un punto de referencia para el brasileño Gustavo Kuerten, invitado especial y en despedida oficial del circuito, cuyo última etapa se dará en Roland Garros. Nunca ganó en Miami pero a "Guga" se le recuerda especialmente por su gran actuación en la edición del 2000, cuando derrotó en semifinales a Andre Agassi y protagonizó luego una de las mejores finales en la historia de este torneo contra Pete Sampras, aunque perdió por 6-1, 6-7 (2), 7-6 (5), y 7-6 (10).

En la competición femenina, ausente la rusa Maria Sharapova por una lesión en el hombro, son muchas las que optan al título conseguido el pasado año por la estadounidense Serena Williams, pero sin duda alguna es la serbia Ana Ivanovic la que parece más decidida.

Ganadora en Indian Wells, Ivanovic, segunda del mundo, parece haberse sacudido ya el lastre emocional que supuso su derrota en la final del Abierto de Australia ante Sharapova. Pero en Miami deberá hacer frente a la incorporación de la belga Justine Henin, la número uno del mundo, ausente del circuito desde que perdió en los cuartos de final del torneo de Dubai contra la italiana Francesca Schiavone.

Henin ha triunfado esta temporada en Sydney y Amberes, y siguiendo escrupulosamente su calendario ha desistido de Indian Wells y reaparece en Miami, tras inaugurar este domingo una academia de tenis en Orlando junto con su entrenador, el argentino Carlos Rodríguez. Su regreso significará el mejor contraste para Ivanovic.