Correa analiza las consecuencias de la muerte del ecuatoriano en el ataque a las FARC

Quito.-  El presidente de Ecuador, Rafael Correa, analiza hoy con varios de sus ministros las eventuales consecuencias en las relaciones con Colombia de la muerte de un ciudadano ecuatoriano en el ataque militar colombiano contra un campamento de las FARC en Ecuador el pasado 1 de marzo.

(EFE)

Correa dijo en su cadena radial del pasado sábado que si se confirmaba que uno de los cadáveres trasladados a Bogotá pertenecía a un ecuatoriano, sería "extremadamente grave porque ya sería el asesinato de un ecuatoriano en suelo del Ecuador por fuerzas extranjeras".

Correa está reunido desde la mañana con la canciller María Isabel Salvador, el ministro de Gobierno, Fernando Bustamante, y el ministro de Justicia, Gustavo Halk, para tratar el tema, aunque no ha trascendido lo tratado en el encuentro, dijo a Efe una fuente de la Presidencia.

Correa dijo en su cadena radial del pasado sábado que si se confirmaba que uno de los cadáveres trasladados a Bogotá pertenecía a un ecuatoriano, sería "extremadamente grave y tendría más cola este gravísimo problema, porque ya sería el asesinato de un ecuatoriano en suelo del Ecuador por fuerzas extranjeras".

En la misma línea, el ministro de Defensa, Wellington Sandoval, señaló hoy a los periodistas tras un acto militar en Quito que la muerte del ecuatoriano "complica" la situación entre los dos países.

"La situación se complica porque es un ecuatoriano que ha sido muerto en ataque por extranjeros en suelo ecuatoriano", dijo Sandoval en referencia al Franklin Guillermo Aisalia, cuyo cuerpo fue identificado como uno de dos llevados a Colombia por los militares de ese país tras el ataque.

El cuerpo de Aisalia, confundido con el del ideólogo de las FARC "Julián Conrado", fue llevado a Colombia junto con el del portavoz internacional de la guerrilla, "Raúl Reyes", fue identificado por sus padres en una serie de fotografías que aparecieron en los medios de comunicación.

El ministro de Defensa Colombiano, Juan Manuel Santos, señaló ayer que el cadáver trasladado a Bogotá junto al de "Reyes" correspondía al de un ciudadano ecuatoriano.

Las autoridades colombianas aseguraron que era miembro de las FARC, conocido como Franklin Ponelia Molina y con el alias de "Lucho", especializado en conseguir documentación falsa y facilitar los movimientos a miembros del grupo.

La Policía de Ecuador, por su parte, investiga qué hacía Aisalia en el campamento de las FARC atacado por militares colombianos en territorio de Ecuador.

El jefe de la Policía, Bolívar Cisneros, dijo hoy a los periodistas que es necesario "determinar qué hacía ahí, y esa es la investigación" en la que se está "trabajando".

También el fiscal general subrogante, Alfredo Alvaer, dijo hoy a los periodistas que se pudo identificar a Aisalia después de que la Policía de Ecuador enviara sus huellas digitales a la colombiana.

"Enviamos esto (las huellas) el 17 de marzo y, a su vez, la Policía judicial se puso en contacto con la Interpol de Colombia y ha determinado indudablemente que la persona asesinada corresponde a los nombres de Franklin Guillermo Aisalia Molina", dijo Alvear.

Los padres de Aisalia, que tenían previsto viajar hoy a Colombia para reconocer el cuerpo de su hijo y hacer las gestiones para su repatriación, no se desplazaron a ese país y no saben cuándo podrán hacerlo.

El padre, Guillermo Aisalia, acudió a la Fiscalía para una prueba pericial grafológica de su hijo y negó tajantemente que fuese miembro de las FARC.