Francia niega que sea una tragedia y minimiza la división entre los europeos

Bruselas.-  El ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner, ha negado hoy que la independencia de Kosovo sea "una tragedia" para nadie, ni siquiera para Serbia, y ha minimizado las diferencias entre los países europeos respecto al reconocimiento del nuevo Estado.

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(EFE)

El ministro de Exteriores francés, Bernard Kouchner.

"No podemos decir que esto sea una tragedia. Para empezar era muy esperado e incluso está pasando mejor de lo que habíamos previsto", ha declarado a los periodistas a la entrada de la reunión con sus colegas de la UE.

"Veo titulares que hablan de gran división en Europa. ¿Qué división? Ya sabíamos muy bien lo que iba a pasar, sabíamos que había posiciones distintas, habíamos tenido siete u ocho sesiones de trabajo".

"Y hay posiciones distintas", ha añadido, "porque hay países que tienen problemas dentro de sus fronteras, pero creo que al final habrá un texto. El reconocimiento es una elección nacional y todo el mundo es libre de hacer lo que quiera".

"Yo diría que esto es un gran éxito para Europa y los kosovares, y desde luego no un fracaso para los serbios; espero que vengan muy pronto con nosotros dentro de la UE".

Según el ministro francés, el proceso "está totalmente en línea con la legalidad y con la resolución 1244 (del Consejo de Seguridad) y el trabajo de Martti Ahtisaari en la ONU".

"Es una sorpresa, pero no una verdadera sorpresa; es una noticia, pero no una verdadera noticia", ha remachado Kouchner.

Preguntado cómo había recibido la declaración kosovar de independencia, el ministro ha respondido que "con alegría", también "alegría por los serbios, porque creo que es el principio para los serbios de la marcha que les va a conducir hacia la Unión Europea".

"Sé que es muy penoso para ellos, sé que tienen en Kosovo mucho de su historia y un trozo de su corazón, pero no había otra solución salvo el enfrentamiento perpetuo".