Barack Obama y Hillary Clinton demostraron hoy que los demócratas están más divididos que nunca, mientras los republicanos consiguieron en el "supermartes" unir sus fuerzas en torno a John McCain, que es ya el claro favorito para conseguir la candidatura republicana. McCain ganó en un total de nueve estados, entre ellos California y Nueva York, las dos "joyas de la corona" de esta jornada maratoniana, pues son los dos estados que más delegados aportarán a las convenciones de los dos partidos. Lo mismo ocurre con Hillary Clinton, que demostró su fortaleza en California y Nueva York, aunque, por número, Obama se impuso en un número mayor de estados, trece, frente a los ocho de la ex primera dama. 0,