Miles de ciudadanos vascos muestran en silencio su repulsa por el atentado de ETA

Bilbao.-  Miles de ciudadanos vascos han secundado la convocatoria de EUDEL y el lehendakari y se han concentrado este mediodía ante Ayuntamientos y centros de trabajo en repulsa por el atentado de ETA en Francia, que causó la muerte de un guardia civil y heridas de extrema gravedad a otro, que se encuentra en muerte cerebral.

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(EFE)

Un grupo de ciudadanos se concentró frente al ayuntamiento de Bilbao en repulsa por el atentado perpetrado por ETA en Francia el pasado sábado, en el que falleció un guardia civil y otro se encuentra en situación de muerte cerebral.

La lluvia no ha impedido que en los Ayuntamientos de las tres capitales vascas así como en las sedes forales de cada territorio se hayan producido las concentraciones silenciosas más numerosas con presencia de los principales cargos institucionales y líderes políticos del País Vasco, que han coincidido en llamar a la unidad de los demócratas contra el terrorismo.

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, ha presidido la concentración celebrada frente a la sede del Gobierno vasco en Vitoria, junto a varias decenas de funcionarios y consejeros del gobierno, entre ellos la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia.

En Bilbao, el alcalde,Iñaki Azkuna, al frente de la corporación, ha estado arropado por un centenar de personas, entre ellas representantes de todos los partidos políticos democráticos como el recién nombrado presidente del PNV, Iñigo Urkullu; el secretario general del PSE-EE, Patxi López; el coordinador general de EB, Javier Madrazo, dirigentes del PP como Leopoldo Barreda y Antonio Basagoiti; y el secretario general de EA, Unai Ziarreta.

Azkuna, López y Barreda han hecho llamamientos a la unidad de todos los demócratas para derrotar a ETA, algo que, según el dirigente socialista, sería el "mejor mensaje, el más contundente que podríamos enviar a ETA", mientras que Madrazo ha pedido a los partidos y los Gobiernos vasco y español que avancen "por la vía del diálogo" para "asentar las bases de la pacificación".

Entre los dirigentes políticos ha habido varias decenas de ciudadanos, algunos de los cuales portaban banderas españolas, una de ellas con un crespón, que han coreado un "viva la Guardia Civil" al término de la concentración.

La judicatura y el sindicalismo también han salido hoy a la calle. Así, en la escalinata de acceso al Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, en Bilbao, se han concentrado magistrados y funcionarios, con el presidente del tribunal, Fernando Ruiz Piñeiro, y la presidenta de la Audiencia Provincial de Vizcaya, Ana Iracheta, al frente.

Los integrantes del Comité Nacional de UGT de Euskadi, reunido en Bilbao, se han congregado a mediodía a las puertas de la sede del sindicato en la capital vizcaína y, al término del acto, el secretario general de la central, Dámaso Casado, ha pedido la disolución "inmediata" de ETA y ha instado a la izquierda abertzale a rechazar "de forma clara y concreta" los asesinatos, la "kale borroka" y las amenazas a empresarios y a "toda la sociedad".

En Vitoria, la concentración más numerosa ha tenido lugar frente al consistorio, donde varios cientos de personas han finalizado los quince minutos de silencio con aplausos, vivas a la Guardia Civil y a la policía, a España y alguno aislado en contra del presidente del Gobierno.

Allí se han reunido el delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, y el alcalde, Patxi Lazcoz, con representantes de los diversos partidos políticos, entre ellos el 'popular' Alfonso Alonso, quien ha insistido en que "no puede quedar margen de impunidad para ningún grupo de los que forman parte del entramado terrorista".

En San Sebastián, el consejero vasco de Justicia, Joseba Azkarraga, ha opinado tras concentrase ante la sede foral junto a un centenar de personas que el hecho de que ANV no haya condenado el atentado "no es delito" pero tampoco un obstáculo para "exigir" a esta formación "que deje ya su silencio".

Frente al consistorio se han reunido además del alcalde, Odón Elorza, y su corporación, la presidenta del PP del País Vasco, María San Gil y dirigentes políticos de otros partidos.