La Baronesa amenaza con llevar el Museo Thyssen a otro lugar de Madrid

Madrid.-  La baronesa Thyssen, Carmen Cervera, ha amenazado hoy con llevarse el Museo Thyssen a otro lugar de Madrid con menos tráfico, en el caso de que el proyecto de remodelación del eje Prado-Recoletos diseñado por el Ayuntamiento de la ciudad siga adelante.

Carmen Cervera ha asegurado, en una rueda de prensa para dar a conocer su opinión sobre el proyecto presentado recientemente por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que se opondrá "rotundamente" al mismo al considerar que el Museo está "totalmente desfavorecido".

En su opinión, el nuevo proyecto presentado por el alcalde perjudica al Thyssen y pretende llevar todo el tráfico rodado de la zona por delante del Museo, lo que -ha considerado- generaría una contaminación que "puede producir un grave deterioro y poner en peligro" su colección.

Además, ha asegurado que prefiere esperar a ver si este plan de remodelación del eje Prado-Recoletos avanza antes de seguir las conversaciones con el Gobierno sobre el Museo, ya que -ha dicho- ahora está centrada en esta cuestión y no puede ocuparse de otros asuntos.

El ministro de Cultura, César Antonio Molina, ha asegurado que su departamento "entiende el malestar" expresado por Carmen Cervera y que espera que la reforma del eje Prado-Recoletos "no se lleve a cabo sin el acuerdo con el Museo Thyssen".

Molina ha señalado en declaraciones a Efe que en el interés del Ministerio "estará siempre lo que resulte más beneficioso para el Museo Thyssen".

La baronesa ha anunciado que presentarán las oportunas alegaciones al proyecto del arquitecto portugués Alvaro Siza, y ha denunciado el hecho de que con el mismo la sombra de los árboles sólo beneficiará al tráfico rodado, mientras que para los peatones y visitantes del Museo la zona "será un desierto".

Cervera ha considerado que con el proyecto presentado es "imposible" reducir el tráfico un treinta por ciento, y ha criticado el trato que se le da al Thyssen en favor de otros edificios como el Museo del Prado o el hotel Ritz.

Ha denunciado que la polución y la vibración que puede sufrir la zona a consecuencia del tráfico rodado puede deteriorar "los tesoros de la colección", ha criticado la reducción de casi un metro de acera frente al Museo sobre el proyecto inicial, y ha pedido al alcalde de Madrid y a sus arquitectos "que recapaciten, igual que hicieron con los árboles, a los que hemos conseguido salvar".

Asimismo, a la "presión física" que sufrirán las obras del Museo también se unirá -ha dicho- "la presión psicológica" que sufrirán sus visitantes, y ha anunciado que no descarta "alguna movilización" u otro tipo de actos para salvar su colección.

La baronesa, para quien el proyecto del "Salón del Prado" parece diseñado para "niños de Disneylandia", se ha definido como "apolítica" ha asegurado que "no hay nada personal" en su oposición al plan de Ruiz-Gallardón y ha elogiado el rechazo de la Comunidad de Madrid y de su presidenta, Esperanza Aguirre, al mismo por considerarlo "banal".

Carmen Cervera ha asegurado que en los últimos meses ha esperado en vano la llamada del alcalde para pedirle opinión sobre el proyecto y ha subrayado que todavía espera que le llame.

Por su parte, el conservador jefe del Museo, Guillermo Solana, ha afirmado que este proyecto "no contenta a nadie y ha sufrido bandazos" desde el principio, y ha considerado que el mismo es "un cadáver al que tratan de resucitar con cosmética".

El director-gerente del Thyssen, Carlos Fernández de Henestrosa, ha calificado el proyecto de "absolutamente rechazable", y ha ironizado al señalar que la idea de recuperar el "Salón del Prado" puede ser "romántica, bonita e incluso un poco cursi, pero no necesariamente racional".