¿Son eficaces los videojuegos que estimulan la inteligencia?

Un experta en estimulación intelectual asegura: "El cociente intelectual varía muy poco a lo largo de la vida y los juegos en sí no mejoran la inteligencia" y una neuropsicóloga advierte: "Son eficaces para entrenar funciones concretas, como la atención o la memoria, pero no sirve para que surjan otras nuevas". En definitiva: "Consiguen mejorar el rendimiento, pero no la capacidad general".

Alguna vez te has avergonzado de no recordar la tabla del ocho? ¿Quieres mejorar tu nivel de inglés sin tener que estudiar? ¿Te da pereza apuntarte a la autoescuela? En cualquiera de estas situaciones tendrías un buen aliado en tu móvil. ¿Cómo? Descargándote juegos de tipo coaching (entrenadores) que, a base de práctica, estimulan tus neuronas. Ya sabes, diviértete y no volverás a olvidar cuánto es 8 x 9.

El doctor Ryuta Kawashima, catedrático de la Universidad de Tohoku (Japón) y autor del best seller Brain trainer: desarrolla tu mente en 60 días, explica: "Del mismo modo que la actividad diaria no es suficiente para mantenernos físicamente en forma, usar el cerebro de manera rutinaria no supone ningún desafío para nuestra mente. Por eso es bueno obligarnos a realizar diferentes tareas mentales durante al menos cinco o diez minutos todos los días". Estos ejercicios pueden ser, por ejemplo, los que propone Mobile Brain Trainer.

Entonces, si jugáramos a diario... ¿seríamos más inteligentes? "No, el cociente intelectual varía muy poco a lo largo de la vida y los juegos en sí no mejoran la inteligencia, del mismo modo que el movimiento en sí no es una fisioterapia adecuada para cualquier lesión", explica Marta Eugenia Rodríguez, directora de Sapientec Siglo XXI, una empresa que se dedica a la estimulación intelectual.

Estimulan zonas que no se suelen utilizar
Sin embargo, la práctica diaria con estos videojuegos puede beneficiar a nuestro cerebro ya que, como argumenta la neuropsicóloga de Isep Clínic Vanesa Rodríguez, "con ellos se ejercitan zonas cerebrales que, tal vez por el estilo de vida o las facilidades que nos da la tecnología, no utilizamos a diario".

Por ejemplo, podemos potenciar algunas capacidades al hacer cálculos mentales sencillos en lugar de usar una calculadora, o memorizar un teléfono en vez de recurrir a la agenda del móvil. De este modo "conseguimos mejorar el rendimiento, pero no la capacidad general", apunta la neuropsicóloga, que añade: "Estos juegos son eficaces para entrenar funciones cognitivas concretas, como la memoria o atención, pero jamás para que surjan otras nuevas".